Durante su homilía en la misa de Catedral, Vera López comentó que recientemente platicó con los padres de un estudiante desaparecido, quienes le revelaron que, por error, los estudiantes tomaron un camión cargado de droga, protegido por grupos del Gobierno.
“Cuando el GIEI está aclarando las cosas, cuando ya tenían medido qué grupos habían intervenido de los grupos policiacos, del Ejército mismo, las policías, la Policía Federal, grupos paramilitares, cuando ya tenían descubierto que el problema era un camión, que los estudiantes ingenuamente habían agarrado un camión cargado de droga que se iba a Chicago”, dijo el Obispo a los fieles.
“Todo eso lo descubrieron, ¿saben ustedes lo que hizo el Gobierno mexicano?, ¿tomar esos datos y seguir investigando?, no, ¡correr a esos especialistas porque estaban sacándole al Gobierno todo lo que ellos habían hecho con estos chicos!”.
Vera dijo que los padres del estudiante normalista sabían de la corrupción de sus autoridades locales, y tenían la esperanza de que el Presidente Peña Nieto los ayudara al conocer lo ocurrido, pero sucedió lo contrario.
“Me dijeron los papás, ‘creíamos que el Presidente se iba a preocupar por nosotros y la manera tan fría que nos trató. Esperábamos a un hombre preocupado y vimos todo lo contrario'”.
El Obispo Raúl Vera tomó el caso de los 43 estudiantes desaparecidos de Ayotzinapa, como una manera de involucrar a los cristianos en su entorno para construir una sociedad más justa.
Al tomar las palabras del Evangelio, donde Jesús dijo que los dos principales mandamientos son amar a Dios y amar al prójimo, Vera dijo que al amar al prójimo no se permiten injusticias contra los demás, como los migrantes.
“Ahí están, cuando verdaderamente los cristianos de México amáramos, no permitiríamos esas cosas”, dijo.
