El gobierno federal no es el único que intercepta las comunicaciones. Pudiera ser un familiar entrometido o un amante celoso.
Entre cinco individuos añadidos esta semana a la lista de cibercriminales más buscados por el FBI está un salvadoreño que creó un programa de 89 dólares llamado “Loverspy” y “Email PI”.
Vendido en el internet por el autor desde su apartamento, el programa fue anunciado como una forma de sorprender a un amante infiel. Para ello se le envía una tarjeta electrónica de felicitación que, al ser abierta, instala software malicioso que captura correos electrónicos y mensajes instantáneos, e incluso espía a la persona por medio de su cámara web.
El caso de Carlos Enrique Pérez Melara, de 33 años, es notable porque al parecer él ganó muy poco dinero con el esquema, a diferencia de otros en la lista del FBI acusados de defraudar de millones de dólares a empresas y usuarios del internet en todo el mundo. Pérez Melara estaba en Estados Unidos con visa de estudiante en el 2003 cuando fue acusado de ayudar a convertir a un usuario promedio en ciberpirata que podía usar la información para acosar a sus víctimas.
Loverspy fue diseñado “pensando en el sigilo en mente, ya que sería indetectable por 99,9% de los usuarios”, de acuerdo con un auto federal de instrucción de cargos contra Pérez Melara presentado en julio del 2005.
Un jefe de sección del FBI que supervisa operaciones de la agencia en la división contra crímenes cibernéticos, John Brown, dijo que Loverspy era uno de muchos servicios ilegales de ciberintrusión disponibles en la red. En un caso este año, un detective de la policía de Nueva York fue arrestado por gastarse más de 4.000 dólares en servicios de ese tipo para obtener mensajes electrónicos de más de una docena de sus colegas. Muchos de los operadores de esos servicios están basados en el extranjero.
“Se trata de personas conocedoras que saben cómo esconderse en la internet”, dijo Brown.
Brown dijo que Pérez Melara fue añadido a la lista del FBI en parte porque el ex estudiante universitario ha resultado muy difícil de ubicar. Ha evadido a las autoridades desde que se presentaron los cargos en su contra hace ocho años, y su último paradero conocido fue en El Salvador. El gobierno estadounidense ha ofrecido una recompensa de 50.000 dólares por información que ayude a su arresto.
Otro en la lista del FBI son el ruso Alexsey Belan, acusado de intrusión en las redes de computadoras de tres importantes compañías de comercio en la internet, robarse datos de usuarios y venderlos.
Fuente: AP