Los elementos ministeriales asesinados el lunes por la noche en San Pedro fueron identificados como el jefe de Inteligencia de la Agencia Estatal de Investigaciones (AEI) y su escolta, dio a conocer el procurador de Justicia, Roberto Flores Treviño.
En el estacionamiento de la tienda Office Max, ubicada en la colonia Carrizalejo, perecieron por heridas de arma de fuego el doctor Carlos Arturo Valle Novelo, coordinador del área de Análisis e Información, responsable del Área Inteligencia de la AEI, así como su escolta, Javier Alejandro Rodríguez Rodríguez, agente activo de la corporación.
El funcionario rechazó mencionar el posible móvil del crimen, aunque reveló que en el ataque fueron disparados en su contra aproximadamente 30 disparos de arma larga e igual cantidad de arma corta.
Flores Treviño rechazó explicar por qué Valle se encontraba acompañado únicamente por un solo escolta, si se considera que su trabajo era estratégico en la corporación.
“Esa es una información muy delicada y preferiría no hablar de ella”, dijo el procurador en la conferencia de prensa que ofreció esta mañana.
Relató que los elementos ministeriales entraron a la tienda de artículos de oficina, donde el Jefe de Inteligencia adquirió un paquete de hojas. Al salir, se dirigían a la camioneta Dodge Ram 2500 blanca, propiedad del Gobierno del Estado y fueron interceptados por varios pistoleros que les dispararon.
Los dos perecieron de manera instantánea.
Cerca del lugar de los hechos había una mujer policía de San Pedro, quien fue la primera que acudió al sitio del doble homicidio.
El procurador de justicia reconoció que Valle Novelo participaba en la investigación que llevó a la captura de Fernando Aguilera Hernández, El Pelón Fantasy, número 2 del cártel del Noreste en la entidad, y de un cateo efectuado el lunes en una bodega en el municipio de Guadalupe, donde fue encontrada mariguana y fueron detenidas varias personas, aunque rechazó señalar si estos casos están relacionados con el ataque mortal.
Mencionó que hasta ahora no tiene conocimiento de amenazas que hubieran recibido los mandos de la dependencia.
Fuente: Apro
