La compañía quiere registrar la frase como una de sus marcas y así asegurar que no pueda ser comercializada por otra empresa, informó StitchKingdom.com, considerada “la fuente no oficial número uno de noticias de Disney”
The Walt Disney Company quiere apropiarse del concepto “Día de los Muertos” —tradición mexicana de raíces prehispánicas— y ya está tramitando la solicitud para lograrlo.
La compañía quiere registrar la frase como una de sus marcas y así asegurar que no pueda ser comercializada por otra empresa, informó StitchKingdom.com, considerada “la fuente no oficial número uno de noticias de Disney”.
De concretarse, detalló el portal, si alguien quiere lanzar juguetes, videojuegos, joyería, pasta dental o hasta pijamas relacionadas con la celebración del 2 de noviembre, se las verá con el gigante corporativo detrás de Mickey Mouse.
El registro es parte de la ruta para una nueva cinta de Pixar, aún sin título, basada en la tradicional festividad mexicana.
El año pasado, John Lasseter, director creativo de Pixar, anunció que entre los proyectos más importantes de la compañía está la producción de una cinta animada inspirada en el Día de Muertos, que será estrenada en 2015.
“Es una festividad más asociada con México, donde sirve como fiesta nacional el 1 y 2 de noviembre, los días siguientes al Halloween, en que las familias se reúnen para recordar y rezar por los familiares que han fallecido.
“Curiosamente, ha sido seleccionado como tema para una próxima película de Pixar Animation Studios, que será dirigida por Lee Unkrich”, publicó el sitio.
El proyecto se conoce hasta el momento como “The Untitled Pixar Movie about Dia de los Muertos” (La Película Sin Título de Pixar sobre el Día de los Muertos).
De acuerdo con el portal, que la compañía busque el registro podría indicar que Disney simplemente trata de protegerse o que Pixar ha decidido llamar al filme Día de los Muertos.
Tener la marca registrada de un concepto exitoso puede traducirse en miles de millones de dólares, pues muchos filmes hollywoodenses terminan siendo minas de oro por los ingresos adicionales a la venta de boletos en taquilla.
Para muestra, ahí está El Rey León (The Lion King), que Disney produjo en su momento a un costo de 55 millones de dólares, en 1994.
En ese entonces, la famosa película animada generó 313 millones de dólares en los cines estadounidenses y 454 millones de dólares en el mercado internacional.
Además, vendió 520 millones de dólares en videos y los fans se gastaron 3 mil millones de dólares en toda clase de productos derivados de la película.
Fuente: Terra Noticias