El secretario para el Brexit del Reino Unido David Davis y su adjunto Steve Baker renunciaron este domingo al Gobierno británico en lo que amenaza con ser un gran golpe para la autoridad del Primera Ministra, Theresa May.
Las renuncias se producen solo dos días después de que la Premier aseguró el respaldo de su gabinete para un plan para mantener estrechos vínculos con la Unión Europea después de abandonar el bloque.
Davis y Baker, ambos euroescépticos de larga trayectoria, decidieron que no podían respaldar a la política, según declaraciones de una persona familiarizada con el asunto.
La oficina de la Primera Ministra confirmó la dimisión de Davis, aunque aún no había hecho ningún comentario sobre los motivos.
Los dos funcionarios y otros miembros del partido conservador a favor del Brexit expresaron su profunda preocupación por sus planes para mantener el Reino Unido sujeto a las normas de la Unión Europea sobre bienes y en la adopción de un acuerdo aduanero cercano con los otros 27 países miembros.
Los políticos manifestaron que creen que Reino Unido debería tener una ruptura limpia con el bloque y liberarse para buscar nuevos acuerdos comerciales con otros países, así como para crear sus propias leyes, libres de la influencia europea.
Como ministro responsable de las negociaciones Brexit, Davis es una voz importante en el debate en Reino Unido.
La doble renuncia del domingo aumenta la posibilidad de minar el Gobierno de May y poner en marcha una cadena de eventos que podría conducir a un intento de sustituirla.
Por lo que su posición puede alentar a los legisladores a favor del Brexit para que actúen en su contra.
Con las renuncias, llega en un momento crítico y muy delicado para la estrategia de la Premier, ya que busca avanzar en las negociaciones con Bruselas en el acuerdo de separación que se cerrará en solo 15 semanas, aún con obstáculos importantes que superar.
El viernes, May alcanzó un consenso poco común en una reunión clave del gabinete en su casa de campo de Checkers, sobre el camino a seguir para las negociaciones con la Unión Europea, para dar inicio a las conversaciones que se han estancado durante meses.
Davis y su compañero en el Brexit, el Secretario de Relaciones Exteriores Boris Johnson, acordaron apoyar la propuesta de May de una separación más suave de lo que había planeado originalmente, y parecía que ella había sobrevivido a la tormenta.
En tanto, los aliados de Johnson dijeron el sábado que decidió no renunciar ya que quería permanecer en el Gobierno para luchar por el tipo de Brexit por el que hizo campaña.
Sin embargo, después de reflexionar sobre la situación, Davis y Baker aparentemente decidieron que no podían vivir con un Brexit tan suave después de todo.
May tendrá una reunión clave con los miembros de su partido para discutir su plan en el Parlamento este lunes, mientras algunos legisladores ya han expresado sus dudas sobre el tema.
Fuente: AP
