El procurador Federal de Consumidor, Ricardo Sheffield, informó esta mañana que, como parte de los operativos de verificación de las estaciones de gasolina, se ha detectado el uso de un software adaptado a las bombas para realizar el “rastrillo” en la venta. Subrayó que con este descubrimiento, las concesionarias pasan de incurrir en una falta administrativa a cometer un delito que se denunciará a la Fiscalía General de la República.
Durante la conferencia matutina, el presidente, Andrés Manuel López Obrador sostuvo que cuando se detecten estos artefactos raros se tiene que proceder legalmente porque se trata de una acción para robarle al consumidor. “Es un delito y se tiene que proceder porque no se pueden vender litros que no sean de a litro”.
Sheffield explicó que los inspectores de la Profeco realizaron la semana pasada la verificación de las 125 estaciones que semanalmente se realizan. Indicó que ya había llamado la atención de que cuando se lograba ubicar que una bomba estaba alterada, el resto de las que eran verificadas en la misma estación sí expendían correctamente.
Sin embargo, en esta ocasión, se realizó una verificación más detallada y se detectó en una gasolinera de Champoton, Campeche, que al abrir una de las “tarjetas” que regulan el servicio de una bomba había un software instalado que era ocupado para realizar el “rastrillo” en las ventas del combustible. Afirmó que en adelante las supervisiones que se realicen serán más detalladas para detectar estas alteraciones.
El titular de Profeco dijo que se trata de un software perfectamente adaptado a la bomba, por lo que es muy probable que el mismo productor haya elaborado también este sistema.
Fuente: La Jornada