El gobierno federal investiga la participación de exmilitares y expolicías en el Cártel Jalisco Nueva Generación. (En la foto de arriba los restos del helicóptero derribado)
“El gobierno federal investiga la formación de células de sicarios similares a las que dieron origen a ‘Los Zetas’ por parte del cártel Jalisco Nueva generación, integrando a sus filas a ex policías y ex militares capacitados en el manejo de armamento, además de que han sido beneficiarios del tráfico de armas procedente de Estados Unidos y Centroamérica, señalaron funcionarios que participan en el Gabinete de Seguridad Nacional”, cita este miércoles el periódico La Jornada.
De acuerdo con la nota informativa, el grupo criminal también logró integrar a sus filas a exmilitares centroamericanos y a desertores del Ejército mexicano.
Gracias a ello, el Cártel Jalisco Nueva Generación concreta la distribución de droga en Centroamérica mediante una asociación con pandillas hondureñas y guatemaltecas.
Las fuentes consultadas señalaron que las investigaciones en torno al cártel Jalisco Nueva generación –integrado inicialmente como un grupo de sicarios al servicio del cártel de Sinaloa– presumen que logró integrar a sus filas a ex militares centroamericanos (como ocurrió con Los Zetas, que sumaron a ex soldados guatemaltecos conocidos comokaibiles) y a desertores del Ejército Mexicano.
El desarrollo operativo que ha tenido esta organización para contener las acciones del gobierno federal y su alta capacidad de fuego están relacionadas con su asociación con grupos que operan el trasiego de droga desde Centroamérica y con grupos que venden armas en Estados Unidos. La asociación con pandillas hondureñas y guatemaltecas (maras) ha permitido que ese grupo tenga centros de operación en esas naciones.
El primero de mayo pasado, Jalisco vivió una de las peores jornadas de violencia de los últimos años, cuando sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación bloquearon 16 vialidades e incendiaron vehículos en varios municipios.
Miembros del Cártel Jalisco Nueva Generación, echando mano de lanza cohetes también derribaron un helicóptero Cougar de la Fuerza Aérea Mexicana, lo que provocó la muerte de seis militares.
Fuente: La Jornada/ Proceso
