El gobierno de Estados Unidos desestimó diversos alegatos presentados el pasado 30 de diciembre por la defensa del exgobernador de Chihuahua, César Duarte, como el que afirma que la vida del acusado corre peligro si es extraditado a México o que el gobierno de Chihuahua lo persigue por motivos políticos, publica El Diario.
“Cuando un estado pierde millones de pesos en corrupción, es razonable que la gente quisiera justicia y que premie a los gobernantes electos que la provean. Segundo, si hay un riesgo a la vida de Duarte, la fuente de ese peligro no es clara”, indicó la oficina del fiscal de Estados Unidos en la respuesta entregada hoy a la corte.
“El hecho de que Duarte pueda tener enemigos en México, incluyendo en prisión, no es razón para negar la extradición”, agrega el texto.
César Duarte, que gobernó Chihuahua entre 2010 y 2016, se encuentra preso en el Centro Federal de Detención de Miami desde el pasado 8 de julio, luego de que fue arrestado en el exterior de un negocio de autopartes ubicado en aquella ciudad.
El exmandatario enfrenta acusaciones de asociación delictiva y peculado por el presunto desvío de 96.6 millones de pesos que habrían sido transferidos en once operaciones a empresas privadas a las que se encontraba vinculado mientras estuvo a cargo del Ejecutivo.
El caso ha sufrido dilaciones luego de que la defensa –a cargo de dos despachos norteamericanos- presentaran una moción para desestimar las acusaciones con base, entre otros alegatos, de que cada una de las 11 transacciones componen un delito diferente y que al menos nueve de ellas habrían prescrito.
Fuente: El Diario
