El más grande reto tecnológico y humano lo enfrentará el avión Solar Impulse 2, creado por los suizos Bertrand Piccard y André Borschberg: dar la vuelta al mundo sin combustible, consumiendo sólo energía solar.
Más de 17 mil células fotovoltaicas convertirán la radiación en electricidad, la cual quedará almacenada en la baterías de polímero de litio, que alimentarán las cuatro hélices de la aeronave, que estará tripulada por Piccard y Borschberg en marzo de 2015.
La nave es la versión mejorada de Solar Impulse 1, proyecto que lleva ya 12 años de desarrollo y en el que ha participado un equipo de 80 especialistas. La primera nave dio la vuelta a EU el año pasado, en un vuelo llamado Across America que comenzó el 3 de mayo en San Francisco (California) y concluyó el 6 de julio en New York.
Fuente: La Razón
