Sun Lijun está señalado como el líder de una “camarilla política” dentro del aparato de seguridad desleal al presidente Xi Jinping
Un antiguo funcionario de seguridad chino acusado de desafiar la autoridad del presidente Xi Jinping fue condenado a cadena perpetua el viernes, semanas antes de un congreso clave de la dirección del Partido Comunista.
Sun Lijun, que fue viceministro de Seguridad Pública, fue condenado a muerte con una prórroga de dos años. El tribunal dijo que la sentencia puede conmutarse por cadena perpetua, pero sin ninguna reducción ni libertad condicional.
El Sr. Sun fue acusado de corrupción masiva de cerca de 100 millones de dólares en sobornos durante dos décadas, así como del cargo más grave de “poner en peligro la seguridad política”, una referencia a desafiar al Sr. Xi.
Su condena siguió a la de otros altos funcionarios de justicia y seguridad acusados de formar parte de una “camarilla” que había desafiado el gobierno del Sr. Xi como “núcleo” del partido.
El jueves, el ex ministro de Justicia Fu Zhenghua fue condenado a cadena perpetua.
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A principios de 2020, el Sr. Sun fue enviado por el Sr. Xi para supervisar la respuesta inicial a la pandemia en Wuhan. Posteriormente fue acusado de “abandonar su puesto en la primera línea de la lucha contra la epidemia de COVID-19” y de “poseer material confidencial sin autorización”.
En el momento de su expulsión del partido el año pasado, la Comisión Central de Inspección Disciplinaria le acusó de “no haberse mantenido nunca fiel a los ideales y la fe del Partido” y de “mostrar una ambición política extremadamente exagerada y una integridad política muy pobre”.
Luchas políticas
Sus acciones reales no se han detallado, pero la declaración del partido sugiere que ha desafiado la autoridad de Xi, un raro reconocimiento público de las luchas políticas internas. En el comunicado se dice que Sun “ha hecho críticas infundadas a la política del Partido y ha difundido rumores políticos”.
Se le acusó de “cultivar sin escrúpulos a seguidores personales y grupos de interés para conseguir beneficios políticos personales” y de “socavar gravemente la unidad del Partido y poner en peligro la seguridad política”.
Es posible que Sun no sea el último funcionario de alto nivel del partido en ser purgado, ya que Xi, que iniciará un tercer mandato sin precedentes tras el congreso del 16 de octubre, sigue reforzando su control.
El fallo del tribunal dice que “se le concedió una sentencia indulgente, teniendo en cuenta que había proporcionado a los investigadores pistas sobre otros casos importantes”.
Fuente: The Hindu
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