Pobladores de Buenavista Tomatlán que mantienen retenidos a nueve agentes de la Policía Federal y dos de la Policía Ministerial de Michoacán acusan al Comisionado Alfredo Castillo de incumplir un acuerdo para dejar en libertad a autodefensas.
Los agentes federales y ministeriales cumplieron 21 horas retenidos por los pobladores.
“El señor Castillo nos da fechas de que ya van a salir, que tal día, que tal día, y no salen. Nosotros queremos que salgan ya”, exigió Luz María García, familiar de dos de los autodefensas detenidos.
En la retención participan principalmente mujeres, madres, esposas o hermanas de 32 autodefensas que fueron detenidos en marzo de 2013, recién gestado el movimiento armado.
“Se los llevaron cuando andaban aquí luchando por el pueblo contra Los Caballeros Templarios”, expresó García.
Los manifestantes aclararon que su movimiento es ajeno al de simpatizantes de José Manuel Mireles, el líder de los autodefensas que fue detenido el pasado 27 de junio.
Los 11 policías permanecían hasta las 19:00 horas retenidos en las instalaciones de la Comandancia de Policía, a un costado del Palacio Municipal.
Cinco de ellos se encontraban ahí cuando decenas de pobladores llegaron a las 22:00 horas del lunes para tomar el inmueble y ya no les permitieron salir.
Los otros seis hacían base en un penal en construcción, que se ubica a unos kilómetros de la cabecera municipal, de donde fueron sacados por los habitantes y traídos a la sede de la Comandancia.
El grupo de pobladores realizó pintas sobre dos patrullas, una de la Policía Municipal y otra de la Policía Federal, las cuales tienen estacionadas afuera del Palacio Municipal.
Debido al conflicto fueron suspendidas las labores del Ayuntamiento, que encabeza el priista Luis Torres.
“Aquí tenemos a los policías federales y de la PGR, aquí los tenemos retenidos adentro de la Comandancia y no los vamos a dejar salir hasta que nos den una respuesta, pero queremos un papel firmado y sellado en donde nos digan que sí van a salir”, amagó otro familiar de los autodefensas presos.
“Ya no queremos palabras porque ya estamos cansados de que nos estén viendo la cara de tontos y no salen”.
Fuente: Reforma
