A partir de la investigación “La Incorporación de China a la nueva fase de desarrollo capitalista a través de las zonas económicas especiales 1978-2006”, que realizó en colaboración con la Universidad de Guadalajara, la doctora Ximena Echenique Romero, profesora del Tecnológico de Monterrey, analizó la propuesta del Presidente de la República sobre la generación de las Zonas Económicas Especiales en el Sureste del país.
La catedrática dijo que la propuesta del Presidente de la República da muestra de que “fue hecha un poco al vapor, porque no especificó qué tipo de zona económica busca desarrollar; es decir si será una zona libre comercio, procesamiento a la exportación o libres puertos”, señaló.
Además, destaca que este tipo de modelo no es el que se plantea por primera vez en la historia de México, tal y como Enrique Peña Nieto lo anunció, pues en 1964 el gobierno estableció una zona de procesamiento para la exportación, lo cual es un primer paso de este modelo de Zonas Económicas Especiales.
En cuanto al impacto, este modelo sólo está diseñado para Chiapas, Guerrero y Oaxaca, estados donde se construirá un gaseoducto, el cual se contempla como un mecanismo de desarrollo a través de infraestructura.
Definió que una Zona Económica Especial es una zona geográfica donde la manufactura cuenta con ventajas fiscales y laborales durante el proceso de producción, transformación o manipulación de mercancías, a la par de que las autoridades locales brindan servicios e infraestructura óptima.
Echenique Romero estableció que México busca replicar el caso de China, país que durante más de 20 años potenció zonas específicas del país en cuanto a producción, puertos abiertos para posteriormente abrirse al mercado internacional.
Sin embargo, señaló que la propuesta enviada al Senado el pasado mes de noviembre no indica las áreas de especialización en que centrarán su actividad, lo que infiere la carencia de un plan estratégico que respalde el decálogo denominado “Por un México con paz y justicia y desarrollo”.
Desde su perspectiva, este modelo que ha sido exitoso en el país asiático, en un corto plazo será detonador de empleos; pero el “verdadero” desarrollo económico surgirá después dos décadas y bajo el respaldo de una fuerte y forzosa inversión en educación y tecnología, de lo contrario –enfatizó- el destino de sureste del país será quedarse simplemente como un área de maquila, cuya fuerza de trabajo estará representada en un 80 por ciento por mujeres.
“Si no se invierte en innovación, las Zonas Económicas Especiales que propone Enrique Peña Nieto se quedarán sólo como parte del eslabón de la cadena de producción”, refirió Echenique Romero.
Esta tesis se reafirma al observar la situación actual del norte del país, donde un producto de consumo se crea a partir de 95 por ciento de insumos extranjeros y 5 por ciento de insumos nacionales.
Fuente: Tec de Monterrey