El Consejo Coordinador Empresarial destacó que hay algunas candidaturas sin aparentes méritos o credenciales para atender la función de representante popular o para tomar decisiones críticas
Por Ivette Saldaña
La elección de candidatos sin méritos aparentes o credenciales que acrediten las capacidades de las personas para cumplir dignamente su función y la selección de aspirantes por nepotismo, pago de cuotas o favores, amplían el alejamiento entre la clase política y el resto de los mexicanos, aseguró el presidente del Consejo Coordinador Empresarial (CCE), Gerardo Gutiérrez Candiani.
Se lanzan “candidaturas de baja calidad” que incluyen a personajes “marcados por el rechazo y el desprestigio”, o sin aparentes méritos o credenciales para atender la función de representante popular o para tomar decisiones críticas.
Sin embargo, ni la abstención, ni el voto nulo o el boicot electoral son soluciones porque se les dejaría el camino libre al llamado voto duro, dejando que los militantes y operadores políticos decidan por todos nosotros. Además de que podrían actuar “a sus anchas” los malos políticos.
Ante las amenazas de que se impidan elecciones en algunos estados, el “Estado tiene y debe garantizar que se realicen en paz y con seguridad los procesos electorales en todo el país, máxime en las zonas donde existen conflictos sociales o fuerte presencia de la delincuencia”, aseguró en su mensaje semanal la Voz del CCE.
Es fundamental se den plenas garantías para la realización de las elecciones en Guerrero, Oaxaca y en algunas otras zonas del país.
En la tarea de la democracia y de llevar a cabo elecciones “todos tenemos que respaldar a la autoridad electoral, y los partidos deben evitar cualquier tipo de acciones que puedan debilitar su funcionamiento, capacidad y credibilidad. El INE y la democracia son propiedad de todos los mexicanos, no de los partidos políticos”, dijo.
Debe evitarse que los procesos electorales agraven los problemas de fragilidad institucional que hay en el país, aumenten el desprestigio de algunos políticos; contaminen la credibilidad y la fortaleza de las instituciones.
Lo peor sería que los mexicanos se retraigan de la vida política, porque “el alejamiento ciudadano del desarrollo de las elecciones contribuye a que los malos políticos prosperen y actúen a sus anchas, sin exigencias de compromisos y planes de trabajo puntuales; y desde luego, sin una posterior rendición de cuentas a sus representados”.
Fuente: El Universal
