Ante el “ultimátum” del gobierno federal de desalojar el Zócalo, el movimiento magisterial decidió “reforzar” el campamento que mantienen en la Plaza de la Constitución.
De hecho, grupos de maestros instalaron valles sobre las calles que dan acceso al Zócalo y en algunos puntos no permiten ya el ingreso a la zona.
Al mismo tiempo, profesores han decidido resguardar sus pertenencias, retirar algunas casas de campaña y concentrarse en calles aledañas, ante la posibilidad de que sean desalojados por la fuerza pública.
Por la mañana la tensión creció entre los manifestantes cuando tres helicópteros sobrevolaron la zona a baja altura, pensando en que el ingreso de la policía era inminente.
Sin embargo, el dirigente de la sección 22 de Oaxaca Rubén Núñez Ginés, informó que por determinación del magisterio se decidió “reforzar” el campamento que mantienen en el Zócalo, pese a que, aseguró, “hay un nuevo ultimátum del gobierno federal para que desalojemos la Plaza de la Constitución al mediodía”.
En conferencia de prensa en el campamento instalado en el Zócalo capitalino, aseguró que la determinación fue “darle continuidad a nuestra jornada de lucha” y anunció que la sesión de su asamblea estatal se mantendrá en receso hasta determinar “qué sigue en las próximas horas”.
Luego de movilizarse en marcha del auditorio del Sindicato Mexicano de Electricistas a la Plaza de la Constitución, Núñez Ginés denunció que “recibimos una llamada de la Secretaría de Gobernación de que o la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación libera este espacio o será retomado”.
Por ello, insistió en que la indicación de los delegados fue regresar de inmediato a su campamento “a reforzar todos los contingentes”.
Fuente: Apro