Robert Kirman es un hombre ocupado por estos días. El creador de “The Walking Dead” aún está escribiendo su cómic (el número 138 fue lanzado hace poco), ya está trabajando en la sexta temporada del gran éxito televisivo, supervisa todo desde cómics nuevos a videojuegos a programas de TV a películas en su productora Skybound Entertainment, y recorre el circuito de conferencias de comics y medios en Estados Unidos. Recientemente realizó varias apariciones en South by Southwest, en Austin, Texas, Estados Unidos.
En público, e incluso en privado por lo poco que vimos, Kirkman da la impresión de tener un bajo perfil: alguien que creció adorándo los videojuegos y los cómics, que trabajó en una tienda de cómics en su ciudad natal de Cynthiana, Kentucky, y que de algún modo terminó en su situación actual.
“Si yo lo puedo hacer, cualquiera lo puede hacer”, dijo sobre el escenario en un evento. Pero al conversar con este hombre de 36 años, casado y con dos hijos, lo que se aprecia detrás de esa imagen de vago es un artista y empresario apasionado que combina ambos roles desde que él mismo comenzó a publicar su primer cómic “Battle Pope”, y quien llegó a donde está al poner tanto ahínco en tener éxito como lo hacen sus personajes para escapar de los caníbales muertos.
La siguiente es parte de una entrevista con The Wall Street Journal.
WSJ: ¿Por qué son tan populares las historias sobre zombis en estos momentos?
Kirkman: Los zombis tratan inherentemente de personas. El vampiro u hombre lobo promedio son monstruos supernaturales con los que la gente no se puede identificar. Pero las historias de zombis tratan de problemas humanos, con lo que cualquiera se puede identificar. Y también creo que los zombis son una encarnación de la muerte, que es un temor que tenemos todos.
La situación mundial actual y lo que aparece en las noticias le generan a la gente una sensación abrumadora de temor por sus vidas cotidianas. Quiere decir que “Walking Dead” puede ser una forma de sentarse y experimentar esos sentimientos de temor de forma manejable.
WSJ: ¿Qué nos puede decir de la nueva serie?
Kirkman: El título aún no ha sido revelado, el desarrollo va muy bien, el piloto ya se filmó, estamos preparándonos para comenzar a filmar más episodios, así que todo marcha sobre rieles. Estamos jugando un poco con la cronología. Nuestra serie comenzará en un momento previo al que comenzó [The Walking Dead]. Definitivamente no es una precuela porque esta serie no terminará en el momento en que empezó la otra. Nos adentraremos en los zombis y veremos cómo cae la civilización y los problemas que tiene la gente por eso en tiempo real, en lugar de que alguien se despierte de un coma y que ya esté sucediendo.
Así que podemos tratar muchos temas que nos habíamos saltado, hay muchos espacios en el desarrollo de los personajes que realmente no tuvimos la oportunidad de explorar en la otra serie y podremos hacerlo en este. Son personajes nuevos, en una región nueva. Es en el mundo de “The Walking Dead” y hay muchos elementos familiares pero a la vez vamos a contar nuestras historias, así que será muy distinto a lo que se prevé.
WSJ: ¿Por qué hacer una serie que se desprende de la original?
Kirkman: Desde el primer día, escuchamos muchas preguntas al estilo de ‘qué está pasando aquí o alla’, debido a que la serie (original) estaba tan centrada en una región que reconocemos que hay una gran oportunidad de abrir este mundo y sumarle a la experiencia general de ver “The Walking Dead”.
Para mí, es un desafío. Creé “The Walking Dead” cuando tenía 23 o 24 años. Entonces, ¿qué puedo hacer ahora? Creo que tenía 34 o 35 cuando comencé a trabajar en esto (la segunda serie). ¿Qué puede aportar el nuevo y mayor yo que pueda superar lo que hizo esa versión joven de mí mismo?
WSJ: ¿Hasta dónde ha planeado sus próximos pasos?
Kirkman: En cuanto al cómic “Walking Dead”, está la situación del cómic ahora, donde lo estoy escribiendo, y está el lugar hacia dónde va el cómic, sobre lo que sé una tremenda cantidad de información, años de historias, que sólo yo conozco.
En cuando a mi carrera, la forma en que siempre operé fue ver qué era posible y qué era probable, y apuntar a lo que es marginalmente posible pero más que probable que no suceda. Así que siempre me esfuerzo por conseguir cosas que si las dijera en voz alta la gente diría que estoy loco. Pero al apuntar a la luna posiblemente podría terminar en la cima de una montaña y eso no está mal. Siento que intentarlo es la parte divertida.
WSJ: ¿Daryl amaba a Beth?
Kirkman: No, Daryl amaba a Beth tanto como a Sophia. No había una relación romántica ahí, en mi opinión. Creo que había camaradería, una amistad, entendimiento, pero no había un gran romance que no se concretó porque ella murió.
Ella era muy joven. Quizás él se enamoró de ella de la forma en que alguien puede convertirse en un padre o hermano mayor sustituto. Tenían una conexión tremenda, pero no todo tiene que ser una relación romántica.
Fuente: The Wall Street Journal