Texas puede seguir prohibiendo la mayoría de los abortos después que una corte federal de apelaciones rechazó este jueves el intento más reciente de la administración Biden para anular una nueva ley que se ha convertido en la restricción más grande del país sobre el aborto en casi 50 años, publica Los Angeles Times.
Esto coloca a la ley de Texas más cerca de regresar a la Suprema Corte de Estados Unidos, que en el mes de septiembre permitió que el estado siguiera adelante con la prohibición de abortos una vez que se detecte la actividad cardíaca, que usualmente es alrededor de las seis semanas. No se han hecho excepciones en los casos de violación o incesto.
Desde entonces, las mujeres de Texas han buscado tener acceso a las clínicas para abortar en los estados vecinos, algunas manejan horas en medio de la noche, incluyendo pacientes tan jóvenes como de 12 años.
La nueva decisión del Quinto Circuito de la Corte de Apelaciones amplía una orden anterior que ahora está vigente en Texas conocida como la Propuesta 8 del Senado.
Se trata de la tercera ocasión desde el mes de octubre que la corte de apelaciones, con tendencia conservadora, se ha puesto del lado de Texas y permite que las restricciones sigan vigentes.
Esto deja al Departamento de Justicia y a las clínicas para abortar en Texas con un estrecho margen de acción para frenar la ley, que hasta ahora ha prevalecido debido a su estructura única que deja su aplicación a los ciudadanos privados.
Cualquier persona que demande a una clínica para abortar por violar la ley tiene derecho a recibir por lo menos 10 mil dólares en daños, que la administración Biden asegura que eso se compara con una recompensa.
Fuente: El Diario. LA Times
