El ex presidente catalán Carles Puigdemont prepara una gran cumbre del independentismo en Waterloo, Bélgica, para el próximo lunes 22 de octubre, informa este lunes El Món, que cita fuentes cercanas al político catalán.
El objetivo del encuentro sería “aclarar la situación” y unificar las estrategias de partidos y entidades independentistas para volver a encauzar al movimiento.
Con ese fin, Puigdemont habría invitado a representantes de los tres partidos independentistas con representación en el Parlamento de Cataluña –Junts per Catalunya (JxCat), Esquerra Republicana de Catalunya (ERC) y la Candidatura d’Unitat Popular (CUP)– y las principales entidades soberanistas de la sociedad civil, la Asamblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, así como de la Asociación de Municipios por la Independencia (AMI).
El medio señala las dificultades logísticas para organizar el cónclave, que se unen a las diferencias entre partidos y entidades sobre qué pasos adoptar para la consecución de la hoja de ruta independentista.
“No saldremos del encuentro con un Power Point, pero sí con una idea más clara de cómo se ha de actuar”, declaró a El Món una fuente conocedora del caso.
Puigdemont trasladó a Bélgica su residencia en octubre de 2017, poco después de la aprobación de la declaración de independencia en el Parlamento de Cataluña del 27 de octubre de 2017, con el fin de eludir la acción de la Justicia española, que poco después reclamó su extradición por supuestos delitos de rebelión y malversación de fondos relacionados con la organización del referendo unilateral de autodeterminación del primero de octubre de 2017.
La CUP no participará
La CUP anunció ya que no participará en la cumbre al considerar que “no responde a un espacio idóneo de debate multilateral.”
En un comunicado remitido a la prensa, la formación anticapitalista explica que decidió declinar la invitación “por respeto a los tiempos internos de la formación, ya que se encuentra inmersa en un debate estratégico con la militancia a lo largo de este fin de semana donde, entre otras cosas, se abordarán las alianzas políticas y las relaciones con los diferentes actores.”
“Por otra parte, aunque la CUP siempre se ha mostrado a favor de habilitar espacios multilaterales de debate, análisis y trabajo sobre octubre de 2017 y sobre estrategias para ejercer la autodeterminación, estos han de responder a criterios de discreción, rigor, responsabilidad, mirada larga, y no han de ser espacios decisorios ni que respondan a voluntades electoralistas”, argumentó el portavoz del Secretariado Nacional del partido, Lluc Salellas.
Por ese motivo, concluyó, “y debido a la sospecha de que este espacio se pudiera ver interferido por intereses partidistas e institucionales, hemos rechazado la oferta”.