El presidente Enrique Peña Nieto ha debido consolar a Rosario Robles, de quien el PAN y ahora el PRD demandan su destitución bajo acusaciones de utilizar la estructura de la Cruzada nacional contra el Hambre para favorecer el voto a favor del PRI en las elecciones locales de Veracruz.
En su discurso del arranque de la Cruzada Nacional contra el Hambre, en Chiapas, el Presidente Enrique Peña Nieto se dirigió directamente a la Secretaria de Desarrollo Social, acusada junto con el Gobernador Javier Duarte de desvío de recursos públicos para beneficiar electoralmente al Partido revolucionario Institucional (PRI).
Le dijo: “Rosario No te preocupes, hay que aguantar, porque han empezado las críticas, han empezado las descalificaciones de aquellos a quienes ocupa y preocupa la política”.
Y ggregó: “Que sigan aquellos criticando las acciones, porque a otros los ocupan las elecciones; a nosotros nos ocupa y nos compromete acabar con el hambre de México”.
El mandatario pidió a Robles: “hay que aguantar”.
Rosario Robles recibió, así, el respaldo del Jefe del Ejecutivo federal. Peña Nieto agregó que el hambre que padecen millones de mexicanos ”no tiene partido, no tiene color, no tiene interés partidario, ya que quienes padecen hambre viven una realidad que es inadmisible”.
En el discurso de la Secretaria, dijo que la Cruzada Nacional contra el Hambre es una tarea primordial del gobierno federal que rebasa el asistencialismo, pero requiere de la participación de la sociedad.
“Este es un gobierno que quiere cambiar estas condiciones y que quiere lograr el México incluyente y con oportunidades para todos los mexicanos, por eso acabar con el hambre es y seguirá siendo la prioridad permanente del Gobierno de la República”, dijo el Presidente mexicano.
Con información de Sin Embargo