El embajador de Israel en Estados Unidos entró y salió de oficinas en la sede del Congreso con la intención de persuadir a los legisladores que el acuerdo nuclear con Irán es un error serio.
Por otro lado, grupos liberales aumentaron la presión, al advertir de las consecuencias políticas para los demócratas que intentan debilitar el acuerdo y que declararse en contra es un voto para la guerra.
La lucha entre grupos es sobre el acuerdo que Estados Unidos y otras potencias mundiales acaban de firmar con Irán. El Departamento de Estado informó el domingo que ya entregó el acuerdo al Congreso e iniciará el periodo de revisión de 60 días el lunes.
Las campañas publicitarias de varios millones de dólares ya comenzaron por parte de grupos políticamente influyentes en cada campo. Algunos repiten los puntos de vista del primer ministro israelí Benjamin Netanyahu, un gran opositor del acuerdo con Irán, que ha amenazado con aniquilar a su país.
El vicepresidente estadounidense Joe Biden estuvo en dos ocasiones en el Capitolio la semana pasada para sesiones de presión con los demócratas. El secretario de Estado, John Kerry, y secretario de Energía, Ernest Moniz —negociadores clave de Estados Unidos— están listos para informar a los legisladores la próxima semana.
El presidente Barack Obama utilizó su discurso de radio de fin de semana para intentar contrarrestar lo que predice que serán “muchos argumentos acalorados y con frecuencia deshonestos” en las próximas semanas en relación al acuerdo, y envió al secretario de defensa, Ash Carter, para que hable con funcionarios a Israel, así como Jordania y Arabia Saudí, aliados de Estados Unidos que están preocupados por las implicaciones del acuerdo.
La Casa Blanca sabe que un voto para aprobar o desaprobar el acuerdo, que se espera en septiembre, pone a los demócratas, sobre todo a los miembros judíos del congreso, en un aprieto.
El Comité de Asuntos Públicos Estados Unidos-Israel (AIPAC) está financiando una campaña con todo para convencer a los legisladores que deben rechazar el acuerdo. AIPAC y otros grupos e individuos que apoyan a Ciudadanos por Irán libre de Armas Nucleares, comenzó el viernes una campaña multimillonaria contra el acuerdo.
Fuente: Huffington Post