La Comisión Nacional del Sistema de Ahorro para el Retiro (Consar) informó que las Afore Inbursa, Pensionissste, Profuturo y XXI Banorte invertirán 13 mil 500 millones de pesos del ahorro pensionario de los trabajadores para la construcción del Nuevo Aeropuerto Internacional de la Ciudad de México (NAICM).
Usan fondos de Afores para financiar nuevo aeropuerto de la CDMX
De acuerdo con el organismo, dicho monto representa el 45% de la oferta global de la emisión del instrumento de inversión Fibra E y el 0.9% del universo total de activos gestionados por las cuatro Administradoras de Fondos para el Retiro (Afores).
Precisó que la emisión de la Fibra E fue por 300 millones de certificados, que equivalen a un monto de oferta global de 30 mil millones de pesos, y tuvo una demanda 14% superior al monto colocado. Entre los inversionistas que participaron destacan las Afores, además de los fondos institucionales y privados, bancas privadas y aseguradoras.
Del total de emisiones para financiar el NAICM (7 mil 500 millones de dólares de bursatilizaciones y la Fibra E), las Afore alcanzan una participación cercana al 10%, mientras que el 90% restante está distribuido entre cientos de inversionistas nacionales e internacionales.
El órgano regulador de las Afores refirió que el pasado 23 de marzo se emitió la Fibra E de infraestructura administrada por el Grupo Aeroportuario de la Ciudad de México (GACM), empresa de participación estatal mayoritaria y titular de la concesión para operar, administrar y explotar el nuevo aeropuerto.
“Los recursos de la Fibra E estarán destinados a que el GACM los utilice para fondear de forma parcial la construcción del Nuevo Aeropuerto”, puntualizó.
En los últimos años, según la Consar, fondos de pensiones globales han invertido en aeropuertos en todo el mundo, incluidos los de Heathrow, Gatwick y el London City en Londres, Birmingham, Bruselas, Puerto Rico, Copenhague y El Salvador, entre otros.
Se trata de la tercera Fibra E colocada en el mercado mexicano desde su creación, en 2015. En octubre de 2016 se emitió una primera Fibra E enfocada a proyectos de infraestructura en el país administrada por Infraestructura Viable, por un monto de 11 mil 835 millones de pesos, y en febrero pasado se emitió la de energía administrada por CFE Capital, por un monto de 16 mil 387.5 millones de pesos.
En total, las Afore han invertido 35 mil 014.6 millones de pesos en los vehículos denominados Fibra E, que buscan atraer financiamiento para proyectos de energía e infraestructura en México.
El respaldo de la Consar
De acuerdo con el órgano regulador del Sistema de Ahorro para el Retiro (SAR), las inversiones en infraestructura tienen para las Afore y los ahorradores en el sistema de pensiones, ventajas relevantes en términos de diversificación y rendimientos para las carteras de inversión, como las siguientes:
Conjugan objetivos de inversión a largo plazo y a gran escala, compatibles con los de las Afore; las inversiones en infraestructura tienen baja correlación con otras clases de activos financieros; proporcionan un flujo constante de efectivo, después del periodo de inversión, y tienen una protección natural ante inflación anticipada y no anticipada.
Además, al ser las Afore inversionistas de largo plazo, es posible invertir en instrumentos respaldados por proyectos de infraestructura de larga duración en los que podrían tener una rentabilidad mejor que los instrumentos tradicionales.
Los comités de inversiones y los órganos de gobierno de las Afore, de manera autónoma, analizan continuamente estos instrumentos para establecer la mejor estrategia de inversión que consideren, tratando de maximizar el rendimiento mitigando los riesgos. Adicionalmente, de acuerdo con la regulación de la Consar, las Sociedades de Inversión Especializadas en Fondos para el Retiro (Siefore) pueden invertir en una misma Fibra hasta el 2% del conjunto de sus activos.
Fibra E es un vehículo de inversión que permite a inversionistas, públicos y privados, monetizar activos que tengan flujos de efectivo predecibles y estables, bajo un régimen fiscal que reduzca los niveles impositivos, permitiendo así mayores distribuciones para dichos inversionistas.
Fuente: Proceso