El Gobierno federal asumirá una parte del pasivo laboral de Pemex y CFE bajo la condición de que en un año estas empresas logren un acuerdo con sus respectivos sindicatos para cambiar el contrato colectivo de trabajo. El objetivo es transitar hacia las cuentas individuales del Sistema de Ahorro para el Retiro y ajustar sus parámetros de pensión de acuerdo con la esperanza de vida.
Así se establece en los artículos transitorios del proyecto de dictamen de la Ley Federal de Presupuesto y Responsabilidad Hacendaria, que mañana viernes discutirán las comisiones unidas de Energía y Presupuesto.
En el caso de Pemex, se indica que dichas modificaciones, sin considerar el reconocimiento del pasivo laboral por parte del Gobierno federal deberán conllevar en el mediano plazo a una reducción del pasivo laboral de la empresa.
“Además, las modificaciones deberán contemplar, al menos, que las pensiones o jubilaciones de los trabajadores de nuevo ingreso sean financiadas bajo esquemas de cuentas individuales que permitan la portabilidad de derechos con el Sistema de Ahorro para el Retiro y que se contemple un ajuste gradual a los parámetros para determinar las pensiones de los trabajadores activos, incluyendo la edad de retiro para reflejar el cambio en la esperanza de vida”, cita parte del texto que se discutirá mañana.
El proyecto de dictamen distribuido a los diputados agrega que el monto que asumirá el Gobierno para el pago del pasivo laboral será proporcional a la reducción del pasivo que resulte del acuerdo para modificar el contrato colectivo de trabajo y el reglamento de trabajo de los empleados de confianza.
En el siguiente transitorio también se indica que el Gobierno asumirá una parte del pasivo laboral de la CFE, sólo respecto a los trabajadores contratados hasta el 18 de agosto de 2008, fecha en que el sindicato suscribió un acuerdo de cuentas individuales.
En este caso, se condiciona que los trabajadores en activo contratados hasta esa fecha se adhieran “de manera voluntaria” a dichos esquemas de cuentas individuales y que se contemple un ajuste gradual a los parámetros para determinar las pensiones de los trabajadores.
El diputado del PRD Miguel Alonso Raya indicó que a los dirigentes sindicales de Pemex y CFE no les queda de otra que aceptar las condicionantes que se pondrán en la legislación para cambiar sus contratos colectivos.
“Es como con el Elba, sólo pueden estar agachados. El Gobierno los pone y el Gobierno los quita, no les queda de otra”, expresó.
Fuente: Reforma
