El Gobierno federal intentó vincularme a trata de personas, acusa el padre Solalinde
El Padre Alejandro Solalinde Guerra, director del albergue “Hermanos del Camino” y quien encabeza la caravana migrante denunció que el bloqueo por parte de la Policía Federal, el cual consideró “un operativo de Estado para un enemigo de Estado”, fue un acto de acoso e intimidación dirigido opositores del Presidente Enrique Peña Nieto.
Por medio de una conferencia realizada esta mañana a unas calles de la Basílica de Guadalupe, en la Ciudad de México, el sacerdote explicó que las autoridades le tendieron una trampa para involucrarlo en un delito de trata de personas.
“Llevaron un Ministerio Público Federal para registrar que soy pollero, para registrar que contrabando personas. Todo lo tenían preparado para que cayera, pero no pudieron”, dijo Solalinde.
Luego del viacrucis, cerca de 350 migrantes arribaron la madrugada de este sábado al Distrito Federal. De acuerdo con Solalinde, todos cuentan con amparo.
El pasado el 24 de marzo iniciaron este recorrido en la frontera de México y Guatemala, el cual se realiza desde hace varios años con el objetivo de hacer visible el drama de las personas indocumentadas que intentan llegar a los Estados Unidos y sufren en México toda clase de abusos, sin embargo, en esta ocasión el Instituto Nacional de Migración (INM) desplegó un amplio operativo alrededor de Ixtepec y advirtió que se permitirá el tránsito de las personas “siempre y cuando tengan el permiso de estancia legal”, lo cual no es el caso de los migrantes que participan en el viacrucis.
Al respecto, el padre Solalinde explicó que jamas se había enfrentado en una situación parecida. “Tengo 20 años trabajando en el istmo de Tehuantepec [Oaxaca] y jamás había visto una ciudad sitiada de esta manera, han puesto varios retenes”, comentó el sacerdote.
La caravana llegó el 9 de abril a la localidad de Ixtepec, en el estado de Oaxaca, donde fue recibida por Solalinde en el albergue para migrantes, “Hermanos en el Camino”.
Sin embargo, un operativo montado por el Instituto Nacional de Migración y la policía les bloqueó el paso durante varios días.
Además, según Solalinde, las compañías de autobús que iban a trasladarlos en ese momento decidieron no hacerlo después de recibir advertencias de las autoridades de que incurrirían en tráfico de migrantes si llevaban a los centroamericanos hasta Ciudad de México.
Solalinde y los migrantes optaron el miércoles por avanzar a pie hacia la comunidad de Juchitán en Oaxaca y aunque en el camino había un retén migratorio finalmente las autoridades optaron por darles vía libre para evitar incidentes mayores.
Con acompañamiento de representantes de la Comisión Nacional de Derechos Humanos, el “viacrucis” reanudó ayer su recorrido.
Además, los organizadores tienen previstas reuniones con representantes de organismos de derechos humanos y un diálogo con senadores.
Fuente: Sin Embargo