Wikileaks lanzó un comunicado en el que lamenta las acusaciones del gobierno de Estados Unidos contra su fundador, Julian Assange.
En el documento, publicado en la red social Twitter señalan que los cargos sin precedentes en contra del programador demuestran la gravedad de la amenaza en contra de los medios de comunicación y de su tarea de mantener informada a la sociedad.
WIKILEAKS RESPONDS TO ESPIONAGE ACT INDICTMENT AGAINST ASSANGE: UNPRECEDENTED ATTACK ON FREE PRESS pic.twitter.com/F0iUyr0R7F
— WikiLeaks (@wikileaks) May 24, 2019
La abogada Jennifer Robinson dijo que las denuncias impuestas contra Assange son el peor ataque a la libertad de expresión, a los medios de comunicación y a la Primer Enmienda de EU.
De acuerdo al comunicado, el gobierno de Trump quiere encarcelar a Julian Assange por supuestos crímenes cometidos fuera de Estados Unidos.
Acusar a Assange de espía provoca alarma entre periodistas
El Comité de Reporteros por la Libertad de la Prensa casi de inmediato emitió una declaración afirmando que el uso de la Ley de Espionaje para “criminalizar el recibo y publicación de información clasificada representa una amenaza grave a periodistas que buscan publicar tal información en el interés público” y que eso no tiene que ver si las autoridades califican o no a Assange como un periodista.
Joel Simon, director ejecutivo del Comité de Protección de Periodistas afirmó que esta acusación contra Assange “es un ataque sobre el Primera Enmienda [de la Constitución, que garantiza la libertad de expresión]y una amenaza a todos los periodistas en todo lugar quienes publican información que los gobiernos prefieren mantener secreta. La libertad de prensa en Estados Unidos y alrededor del mundo esta en riesgo por este enjuiciamiento”.
Edward Snowden, el ex contratista de la Agencia de Seguridad Nacional que detonó un debate mundial sobre el espionaje masivo de ciudadanos por el gobierno, declaró hoy por tuit que “el Departamento de Justicia acaba de declarar guerra -no contra Wikileaks, sino contra el propio periodismo. Esto ya no se trata sobre Julian Assange: este caso decidirá el futuro de los medios”.
Wikileaks respondió por tuit que “esto es locura, es el fin del periodismo sobre seguridad nacional y de la Primera Enmienda”.
Defensores de la libertad de prensa insisten que lo que hizo Wikileaks no es diferente a lo que hace cualquier medio que obtiene y divulga información sobre los gobiernos. Mas aún, señalan, la Ley de Espionaje se ha aplicado tradicionalmente contra oficiales y funcionarios del gobierno, y no contra periodistas y medios. De hecho, Barack Obama, que se distinguió por usar la ley de Espionaje contra filtradores más que cualquier otro presidente en la historia, decidió no proceder contra Assange justo por sus implicaciones contra la libertad de prensa.
Una primera acusación contra Assange fue formulada secretamente en marzo de 2018 en un tribunal en Virginia donde se afirma que conspiró con Manning para realizar una “intrusión” ilegal de un sistema de computo del Pentágono, y con la cual se inició el proceso de su extradición de Gran Bretaña donde actualmente está encarcelado por haber violado su liberado condicional bajo fianza. Ahora los nuevos cargos ampliarán -aunque potencialmente complicarán- la solicitud de extradición que Washington impulsa ante las autoridades judiciales de Gran Bretaña.
Assange fue arrestado por policías locales y sacado a la fuerza de la embajada de Ecuador en Londres donde estuvo asilado durante más de seis años, en abril.
Mientras tanto, Manning, quien cumplió siete de los 35 años de su condena por filtrar los documentos a Wikileaks, antes de que el presidente Barack Obama le otorgara clemencia, está de regreso en la cárcel por rehusarse a testificar por segunda vez ante un gran jurado sobre Assange.
Fuente: La Jornada