La Asamblea Nacional venezolana tiene previsto el miércoles instalar una comisión que investigue las supuestas responsabilidades del líder opositor Henrique Capriles en las protestas de la semana pasada.
La comisión iniciará su sesión a las 10:30 de la mañana locales y “determinará responsabilidad por hechos violentos dirigidos por Capriles”, indicó la Asamblea en un mensaje de Twitter y divulgado por la televisora oficial. No se dieron detalles de quiénes integrarían esa comisión o hasta cuándo extendería sus trabajos.
El gobierno del presidente Nicolás Maduro, cuyos simpatizantes controlan la Asamblea, responsabiliza a Capriles de presuntamente haber ordenado a sus seguidores desde el mismo día de las elecciones, el 14 de abril, atacar sedes del oficialista Partido Socialista Unido de Venezuela, o PSUV, así como puestos de salud estatales y mercados populares.
La fiscal general Luisa Ortega ofreció en una conferencia de prensa el más reciente balance de desórdenes callejeros el 14, 15 y 16 de abril: 9 personas muertas y 78 heridas.
La semana pasada, Ortega daba cuenta de al menos ocho personas muertas pero la víspera murió una niña de 12 años en un hospital de Maracaibo, ciudad capital del estado del Zulia, al noroeste del país. La niña identificada como María Victoria González Báez estaba con otro grupo de personas el domingo por la noche en la calle celebrando el triunfo de Maduro cuando fue arrollada por un camión junto a otras 11 personas, dijo la funcionaria.
Ortega negó que se produjeran maltratos físicos contra manifestantes detenidos, como han dicho grupos de derechos humanos y que “se les ha tratado con el debido respeto”.
Desde las organizaciones de activistas y la prensa “quieren hacer ver al Estado como violador de los derechos humanos… quieren desviar la atención” de las protestas “incitadas” por la oposición, dijo Ortega.
Y al ser consultada sobre el caso de un joven estudiante que recibió el 16 de abril en la ciudad central de Valencia disparos de perdigones en una mejilla, produciéndole graves heridas, dijo que sí tenía el caso, aunque se quejó de que la denuncia fue presentada en el Ministerio Público sólo hasta esta semana.
No respondió consultas sobre versiones de prensa de militares que han sido interrogados o detenidos, y sólo aseguró que mantienen una investigación por mensajes en redes sociales como Twitter llamando a las manifestaciones.
“No pueden quedar impunes las muertes ordenadas por el fascista asesino capriles, las investigaciones van adelantadas, caiga quien caiga”, indicó en la red social Diosdado Cabello, presidente de la Asamblea Nacional.
El ministro de Comunicación Ernesto Villegas dijo que los medios privados pretenden ocultar los muertos por “hechos violentos de la derecha”, y que por eso no han cubierto los muertos ni los incidentes en los centros de atención médica en los barrios populares.
En una intensa campaña de propaganda, los medios oficiales, tanto como el propio Maduro y algunos de sus ministros, han calificado a Capriles de “asesino” y “fascista”, además de prometer que sus “crímenes” no quedaran impunes.
Capriles, un abogado de 40 años, resta importancia a los señalamientos y mantiene que son mentiras del oficialismo, que hasta ahora no ha ofrecido evidencias de que al menos ocho personas que dice murieron entre el 15 y el 16 de abril en distintos puntos del país hayan sido víctimas de ataques opositores.
“La mentira es el refugio de los cobardes!El Gobiernito desesperado sembrando+mentiras,no podrán con la mayoría de los venezolanos”, dijo Capriles en un mensaje de la red social el martes por la noche.
En un ambiente de alta polarización, el gobierno acusa a Capriles y a miembros de su comando de campaña de promover la violencia, pero se cuida y excluye de tales señalamientos a los votantes opositores: más de siete millones de venezolanos. En los comicios del 14 de abril, Maduro obtuvo 7,5 millones de votos, frente a los 7,3 millones de Capriles.
El líder opositor goza de inmunidad como gobernador del central estado Miranda, vecino a Caracas, y cualquier eventual proceso en su contra debe comenzar primero retirando ese fuero, una medida que tendría que autorizar el Tribunal Supremo de Justicia.
La víspera, la ministra de Servicios Penitenciarios Iris Varela afirmó que preparaba ya una celda para Capriles. “No vamos a permitir que estos crímenes queden impunes”, dijo Varela.
“La cárcel que te espera…vamos a ver si ahí te quitamos ese aire fascista, a ver si te quitamos el vicio que tienes, cuando una persona está bajo efectos alucinógenos puede hacer cualquier cosa, deja el consumo de estupefaciente”, añadió la ministra.
Fuente: AP
