Los candidatos republicanos que pretenden relevar a Barack Obama en la Casa Blanca rechazaron este sábado que el presidente designe al reemplazo de un fallecido juez conservador en la Corte Suprema, alegando que la importante decisión corresponde a un futuro mandatario.
Los seis candidatos estuvieron de acuerdo en que el nombramiento de un nuevo magistrado de la máxima instancia judicial no debe recaer en Obama, quien en 11 meses dejará el poder, durante un debate en Greenville, Carolina del Sur, a una semana de las primarias en ese estado del sureste de Estados Unidos.
Y en caso de que Obama proponga un juez, el Senado debe bloquear esa nominación, señalaron los candidatos, que al inicio del debate guardaron un minuto de silencio en honor al juez Antonin Scalia, un verdadero héroe de los conservadores fallecido este sábado a sus 79 años.
“Le corresponde a Mitch McConnell y los demás detenerlo”, dijo el magnate Donald Trump, que lidera las encuestas, en referencia al líder de la mayoría republicana en el Senado, cámara del Congreso a la cual le corresponde ratificar a los jueces de la Corte Suprema.
El Senado debe ser “firme” e impedir a Obama que “nomine a un nuevo magistrado liberal”, dijo el senador ultraconservador Ted Cruz, cuya candidatura ha ganado impulso desde que ganó la primaria en el simbólico estado de Iowa.
“Alguien de los que está en este escenario debe ser el que decida el balance de la corte”, apuntó por su lado el senador de origen cubano Marco Rubio, quien intenta recuperar fuerzas luego de un traspié en las primarias del martes en New Hampshire.
El presidente Obama afirmó este sábado que nominará a un candidato para llenar el vacío dejado por Scalia, lo que augura un fuerte forcejeo con el Senado de mayoría republicana.
Un nuevo juez podría inclinar la balanza de la Suprema Corte, que actualmente cuenta con una mayoría conservadora frente a los liberales.
Fuente: AFP