El economista en jefe del Banco Mundial para Latinoamérica, Augusto de la Torre, manifestó hoy su optimismo sobre el futuro económico de México y destacó que prueba de ello es que su moneda nacional, el peso, “se está volviendo poquito a poco una moneda de reserva”.
“Es la moneda más transada de todas las monedas latinoamericanas, tiene uno de los mercados más profundos y cuando hay sacudidas en las expectativas globales y los inversionistas globales buscan donde refugiarse, cada vez más están buscando el peso mexicano”, enfatizó.
En conferencia de prensa previa a la reunión de Primavera del Banco Mundial (BM) y el Fondo Monetario Internacional (FMI), del 11 al 13 de abril, de la Torre precisó que aunque lejos del dólar estadunidense y el euro, el peso se presenta ahora “como una de las monedas más liquidas, más atractivas”.
Otro factor que motiva el optimismo descansa en las reformas estructurales que tienen lugar en México, y que a decir del BM se espera que arrojen sus primeros frutos a partir de 2015.
“Las reformas son de gestación lenta y hay que tener un poco de paciencia, pero tenemos optimismo de que en 2015 vamos a ver la materialización de los resultados positivos de estas reformas”, dijo el experto.
Explicó que en este caso la expectativa deriva entre otros factores de la fuerte inversión que se anticipa en el sector energético.
“Hay una ventana de optimismo razonable de que México va a encontrar un camino para el crecimiento”, destacó.
Como lo hizo en su oportunidad el FMI, De la Torre aludió las proyecciones que dan cuenta de un repunte en el crecimiento económico de México para este año y 2015 después del tropiezo que sufrió en 2013.
De acuerdo con las proyecciones del FMI, la economía mexicana crecerá este año a una tasa de tres por ciento para pasar a 3.5 por ciento, aunque De la Torre hizo notar que estará por encima del promedio regional “levemente”.
Fuente: Notimex