Los países miembros del BRICS acordaron firmar en julio los documentos para la fundación de un banco propio de desarrollo y de un fondo de reservas monetarias.
Además de la firma de los documentos económicos, los líderes del BRICS también conversarán sobre coordinación política y problemas de gobernación global.
La creación de un banco propio podría ser el primer paso para la creación de la moneda común. El banco financiará grandes proyectos de infraestructura, sustituyendo de esta forma al Fondo Monetario Internacional, controlado por EE.UU.
Se espera que el banco de los BRICS empiece a operar a partir del año 2016. Sin embargo, aún falta por decidir cuál será su sede. Todos los países miembros del BRICS han propuesto sus ciudades para este objetivo, salvo Brasil. Según los analistas, el candidato con más opciones es Shanghái, informa la revista Financial Times.