Con una sobria ceremonia en las mismas Ramblas donde una camioneta arrolló a decenas de personas en 2017, Barcelona recordó el martes a los 16 fallecidos en el doble atentado en Cataluña, el primer homenaje tras la condena a los sobrevivientes de la célula yihadista.
El acto, de apenas 15 minutos y sin ningún discurso, se realizó junto al memorial que recuerda los ataques, y arrancó con la ejecución a cargo de un violonchelista del “Cant dels Ocells”, una pieza tradicional catalana.
En el mismo punto donde Younes Abouyaaqoub detuvo la furgoneta con la que mató a 14 paseantes, familiares y sobrevivientes depositaron claveles blancos en unas jardineras, en presencia del presidente regional, Pere Aragonès, y la alcaldesa de Barcelona, Ada Colau entre otras autoridades.
“Después de cuatro años de la muerte de mi hijo, es muy duro todavía. Creo que cada año lo es más”, explicó Javier Martínez, cuyo pequeño de tres años falleció allí.
A finales de mayo, la justicia española condenó a 53 y 46 años de cárcel a los dos sobrevivientes de la célula yihadista que cometió el doble atentado en Barcelona y en la ciudad costera de Cambrils. Además, otro colaborador recibió una pena de ocho años.
Pero, para algunas víctimas, el juicio debía haber profundizado en cómo un imán pudo radicalizar a una decena de jóvenes de origen marroquí en Ripoll, un apacible pueblo del norte de Cataluña, sin despertar sospechas.
Después del recorrido mortal de Abouyaaqoub en las Ramblas, otros cinco miembros de la banda atropellaron y acuchillaron a varios transeúntes en Cambrils, antes de ser abatidos por la policía.
Tres días después, Abouyaaqoub murió también a manos de los agentes a 30 km de Barcelona. En total, los atentados dejaron 16 fallecidos y 140 heridos.
“No se ha investigado suficiente y el trato a las víctimas sigue siendo muy malo”, agregó Martínez. “Hemos estado muy solos”, lamentó.
Desde la Unidad de Atención y Valoración de Afectados por Terrorismo (UAVAT), también piden una mayor atención para localizar a las 345 personas que, según indican, están calificadas como afectadas.
“En los estudios que hemos hecho de la sentencia, hay un 20% de víctimas indemnizadas, eso significa que el 80% no deben estarlo”, indicó Robert Marique, asesor de UAVAT.
“La pregunta es: ¿se les ha localizado, se les ha asesorado?”, lamentó, afirmando que muchos turistas extranjeros aparecen con sus apellidos mal escritos, lo que dificulta mucho encontrarles.
Fuente: AFP