A Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre le devolvieron sus derechos partidarios gracias a la intermediación de Manlio Fabio Beltrones, aseguró este jueves Armando Barajas, consejero político nacional del Partido Revolucionario Institucional (PRI).
“Su estatus jurídico es que le devolvieron sus derechos partidarios, por parte de Manlio Fabio Beltrones; ahí, yo creo, bajo un acuerdo, alguna cuestión así, pero creo que si tuviera dignidad, si tuviera un poco de vergüenza, no se hubiera presentado a tomar protesta en la comisión permanente del Consejo Político de la Ciudad de México… Yo creo que es un grave error”, subrayó en entrevista con Aristegui Noticias.
Es “grotesco y grave” darle voz a alguien “que vive en la absoluta impunidad”, pese a las múltiples acusaciones en su contra, sostuvo en el mismo espacio la expriista Lorena Villavicencio, presidenta de Mujeres de Hierro.
De acuerdo con Barajas, “es una falta de táctica política tanto de la dirigencia como de los grupos de siempre” haberle reintegrado sus derechos político-electorales a Gutiérrez de la Torre, quien en abril de 2014 fue señalado de encabezar una red de prostitución desde el PRI capitalino.
Es cierto, dijo, que se requiere sumar esfuerzos, “pero no a costa de la dignidad del PRI en la ciudad y de sus militantes, que hemos sido objeto de burla por las acciones que emprendió Cuauhtémoc Gutiérrez y fueron denunciadas”.
El consejero político recordó que ya habían condenado al Revolucionario Institucional a realizar un pago de más de un millón 300 mil pesos, luego de que tres mujeres que fueron víctimas de la red de prostitución que operaba al servicio de Cuauhtémoc Gutiérrez presentaron denuncias formales ante la Procuraduría General de la República (PGR).
El exlíder priista en la Ciudad de México “aprovechó el momento de cambio de dirigencia”, refirió ante la llegada de Eruviel Ávila al PRI capitalino.
Por separado, Lorena Villavicencio destacó que el regreso del hijo del llamado “Rey de la Basura”, Rafael Gutiérrez, “retrata claramente a un partido que no ha tenido sensibilidad” y “sigue cobijando personajes como éste, claramente machistas y misóginos”.
Y consideró que al Revolucionario Institucional “no le interesa la imagen que manda con este tipo de personajes”. Es “grotesco y grave” darle voz, subrayó.
Remató: “El PRI está sordo, ciego, solamente manejado por intereses y complicidades”.
En abril de 2014, el PRI nacional anunció la separación de Cuauhtémoc Gutiérrez de la Torre para realizar una “profunda investigación” que llevara al esclarecimiento de las acusaciones en su contra.
En aquella ocasión confirmó, a través de su cuenta de Twitter, que la separación “se hará mediante la presentación de una licencia que será efectiva durante el tiempo en el que las autoridades realicen las investigaciones correspondientes”.
En julio del año pasado, la Procuraduría General de Justicia capitalina exoneró a Cuauhtémoc Gutiérrez de los delitos de trata de personas y lenocinio, que se le imputaron luego de la publicación de un reportaje donde se advirtió del reclutamiento de mujeres a quienes se ofrecía trabajo de edecanes, pero se les obligaba a tener relaciones sexuales con el entonces líder del PRI en la Ciudad de México.
La información fue dada a conocer en el programa de Carmen Aristegui en MVS Noticias, que realizó una investigación tras recibir las denuncias de dos jóvenes que acudieron a una cita de trabajo en respuesta a un anuncio de empleo.
Según la investigación, las chicas eran captadas a través de anuncios clasificados en los que se solicitaba personal femenino de entre 18 y 32 años para trabajar en oficinas gubernamentales con un sueldo de entre 8 mil y 14 mil pesos mensuales.
Las personas que llamaban a los teléfonos publicados eran citadas en las oficinas del PRI capitalino.
Al llegar a la cita, las chicas eran recibidas por una mujer, quien las inspeccionaba y luego las hacía pasar a las oficinas de Gutiérrez para ser evaluadas; las mujeres que pasaban a una “segunda etapa”, en la que debían tener relaciones sexuales con el líder de los pepenadores eran reclutadas y pasaban a formar parte de una red de prostitución.
Las chicas contratadas recibían su pago quincenalmente a través de la nómina del PRI y aparecían como secretarias o asistentes de ese instituto político.
Según el reporte, las mujeres eran despedidas si faltaban o subían de peso.
Al ser cuestionado sobre las acusaciones, Gutiérrez las negó categóricamente y señaló que fue un invento de hace 12 años, “primero lo manejó el periódico Reforma, y ahora dicen ustedes que tiene un reportaje”, apuntó.
Fuente: Apro