El enfrentamiento entre fanáticos polacos de un equipo de futbol y elementos de la Secretaría de Marina en una playa de Polonia ha provocado un diferendo al más alto nivel entre los gobiernos de México y Polonia, pero las primeras versiones de que fue un ataque racista han derivado a que todo se produjo porque los marinos mexicanos hostigaban a mujeres polacas en el lugar, según difunden algunos medios europeos.
La trifulca en la que se vieron involucrados 57 elementos de la Secretaría de Marina (Semar) –que forman parte de la tripulación del buque-escuela Cuauhtémoc– con fanáticos polacos en una playa contigua al muelle de Gdynia el domingo pasado escaló hasta las altas esferas del poder de ambos países.
El presidente Enrique Peña Nieto reprobó y lamentó el ataque que sufrieron los marinos en Polonia. “Como pueblo y como gobierno, tenemos que reprobar, lamentar y condenar estos hechos”, dijo durante su intervención en la XLV Reunión Ordinaria de la Conago.
Asimismo, expresó su solidaridad “con los marinos mexicanos que lamentablemente fueron agraviados” e informó que solicitó a la Cancillería aplicar las sanciones que la ley prevé para quienes resulten responsables.
El Congreso mexicano solicitó también al Parlamento de Polonia su intervención para sancionar a los responsables de la “artera agresión” contra cadetes del buque-escuela Cuauhtémoc en playas de esa nación europea.
Hasta hoy sólo dos de los polacos fanáticos del club Ruch Chorzow de futbol que participaron el domingo pasado en la gresca con marinos mexicanos han sido imputados y enfrentarán una pena de cinco años de cárcel por golpes y heridas, según informó la policía local.
Michal Sienkiewicz, portavoz de la policía local, informó que tres polacos fueron detenidos el domingo pasado pero dos de ellos son los que enfrentarán cargos.
“Tres polacos fueron detenidos. Dos de ellos (de 25 y 33 años) fueron imputados. Se enfrentan a una pena de cinco años de cárcel por golpes y heridas”, detalló el portavoz.
Inicialmente fueron detenidas 17 personas, entre ellas seis marinos mexicanos que ya fueron liberados y 11 polacos de los que sólo dos serán sometidos a proceso.
De acuerdo con los primeros reportes, un grupo de 300 fanáticos, quienes se dirigían a un partido del equipo Ruch Chorzow atacaron a los cadetes de la escuela naval y oficiales de la Secretaría de la Marina que viajan por el mar Báltico en el buque Cuauhtémoc cuando se encontraban de descanso en la playa.
Sin embargo, Sienkiewicz indicó que en total, entre agresores y agredidos, se vieron involucradas “alrededor de 40 personas”.
El incidente dejó 17 marinos mexicanos heridos, dos de los cuales fueron hospitalizados y reportados fuera de peligro por las autoridades polacas.
Sólo estos dos últimos “fueron reconocidos como víctimas del incidente”, indicó Sienkiewicz, quien afirmó que las autoridades aún no han podido establecer quién comenzó la pelea.
Una versión que fue dada a conocer el lunes pasado, apunta a que el ataque fue por motivos racistas. El diario Gazeta Wyborcza informó que los marinos fueron atacados con botellas mientras los polacos los insultaban llamándolos “negros sucios” (brudasy czamuchy, en polaco).
Sin embargo, otros medios difundieron hoy una versión distinta que apunta a que los agresores polacos habrían reaccionado de forma violenta al hecho de que los marinos mexicanos habrían hostigado a mujeres en la playa.
La radio polaca RMF FM, y medios como la Gazeta Wyborcza y Wprost, citaron a testigos de los hechos, quienes aseguraron que los marinos mexicanos estaban en estado de ebriedad y alguno de ellos habría manoseado a una joven en la playa, lo que desató la ira de los “hooligans”.
Otros medios polacos afirmaron que algunos marinos le hablaban “vulgarmente” a las mujeres bañistas.
Según Newsweek Polska, que publicó una nota titulada “Fans de Ruch Chorzow vs marinos mexicanos. ¿Quién empezó?” al principio el pleito fue entre dos hombres, un polaco y un mexicano, pero se hizo más grande cuando compañeros de uno y otro se acercaron a apoyarlos.
Mientras avanzan las investigaciones, la Procuraduría polaca no ha descartado presentar cargos contra más personas involucradas, y la policía lleva a cabo más detenciones.
El video de las cámaras de la policía polaca sobre la gresca es uno de los más vistos en YouTube.
Según la prensa polaca, hoy se ordenó destituir a Marcina Potrykus, segundo mando de la Policía de Gdynia, tras el incidente entre los marinos mexicanos y fanáticos de futbol.
El ministerio polaco de Relaciones Exteriores lamentó este martes la pelea en la que se vieron envueltos seguidores del club Ruch Chorzow de fútbol y marinos mexicanos.
“En una entrevista con el embajador de México en Polonia, lamentamos este incidente”, declaró Marcin Bosacki, portavoz del ministerio polaco, luego de que el lunes pasado el gobierno mexicano pidió explicaciones a Polonia por la agresión que sufrió el grupo de 57 marinos mexicanos del buque Cuauhtémoc.
Sobre el caso, el embajador de México en Polonia, Ricardo Villanueva, afirmó que la situación en el lugar del altercado “ya está bajo control y se está identificando a los responsables”.
En entrevista para Radio Fórmula, el diplomático atribuyó la agresión a los marinos a un acto de racismo pero sostuvo que también puede ser un hecho asociado al futbol.
“Un par de semanas antes, en las afueras de Varsovia, en un partido de futbol también golpearon gente en una trifulca que organizaron estas porras y violaron a una señora.
“Creo que sí puede haber algo de racismo, pero también está el fenómeno de la violencia asociada al futbol, que en muchos países comienza a ser incontrolable”, dijo, aunque refirió que algunos marinos denunciaron palabras ofensivas.
Villanueva sostuvo que los marinos mexicanos no respondieron a las agresiones de los “hooligans” porque estaban conscientes que representaban a México y que el buque mexicano es muy conocido en Polonia y por ello las agresiones generaron gran descontento entre los ciudadanos de ese país.
Congreso exige castigo a ‘hooligans’
La agresión a los marinos mexicanos también llegó al Congreso que solicitó al parlamento polaco su intervención para sancionar a los responsables de la agresión.
Durante la sesión de la Comisión Permanente del Congreso de la Unión, Ernesto Cordero Arroyo, presidente de la Mesa Directiva, presentó un punto de acuerdo que fue votado de inmediato en el que se califica de “agresión artera” lo ocurrido el domingo pasado.
“La Comisión Permanente del Congreso General de los Estados Unidos Mexicanos expresa su más enérgica condena por la artera agresión a los integrantes de la Armada de México y exige al Parlamento de la República de Polonia su intervención para que las autoridades de ese país expliquen las acciones que han llevado para sancionar a los responsables de tan lamentable acontecimiento”, señala el punto de acuerdo.
La senadora del PRI, María Verónica Martínez Espinoza, respaldó el acuerdo y dijo que la agresión contra estudiantes que fueron agredidos sin una aparente razón, debe ser investigada a fondo.
Los senadores acordaron remitir el punto de acuerdo aprobado a la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) para que por su conducto se envíe a las autoridades de la República de Polonia.
Fuente: Proceso