Así es la vida hoy de “La niña del napalm”

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Juan Carlos López

«La niña del napalm» lo cambió todo. Esta brutal instantánea, tomada por el fotógrafo vietnamita Huynh Cong Út, mucho más conocido como Nick Ut, para la agencia Associated Press durante la guerra de Vietnam, fue premiada con un Pulitzer. Sin embargo, lo realmente importante es que algunos historiadores defienden que esta imagen ayudó a poner fin a la guerra.

Y es perfectamente posible que fuese así. Esta desgarradora fotografía muestra a la pequeña Phan Thi Kim Phúc, que solo tenía 9 años en aquel momento, abrasada por el napalm y desnuda unos instantes después de que un avión de Vietnam del Sur arrojase por error una bomba de esta sustancia sobre Trang Bang, el pueblo en el que vivía. La fotografía apareció en la portada de muchos de los diarios de la época, y pudo influir decisivamente en la forma en que los estadounidenses percibían la guerra de Vietnam, ya en ese momento muy criticada.

Al parecer, el presidente Nixon puso en duda la autenticidad de la imagen de Nick Ut, pero su credibilidad nunca ha sido realmente cuestionada porque Phan Thi Kim Phúc y los otros niños que aparecen en la imagen, que son sus hermanos y sus primos, siguen vivos. Desafortunadamente, las quemaduras de la niña, que hoy tiene 51 años, fueron muy graves. Después de aquel fatídico 8 de junio de 1972 estuvo ingresada en un hospital más de un año, y fue sometida a numerosas operaciones para injertarle piel.

Pero incluso este terrible drama humano tiene un final feliz. Phan Thi Kim Phúc es actualmente ciudadana canadiense, tiene dos hijos y lidera una fundación que intenta ayudar a los niños víctimas de las guerras. Y los demás niños de la fotografía, todos ellos familiares suyos, siguen viviendo en Trang Bang una vida que estuvo a punto de serles arrebatada por una guerra tan inútil e injusta como todas las demás.

Si os apetece conocer esta historia con más detalle no os perdáis el artículo que han publicado en Vanity Fair ayer mismo. En él Nick Ut se reencuentra muchos años después con los auténticos protagonistas de la fotografía que lo consagró como fotoperiodista con solo 21 años. Si os defendéis medianamente con el inglés, dedicadle unos minutos. Merece mucho la pena.

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