Dos sacerdotes católicos perdieron la vida esta madrugada en un ataque armado sobre la carretera federal Taxco-Iguala, al norte de la entidad. También resultaron heridas dos mujeres y dos hombres, según reporta la agencia de noticias de Proceso.
Uno de los presbíteros asesinados esta madrugada en Taxco, el sacerdote del pueblo minero de Mezcala, Germaín Muñiz posando con armas y sujetos encapuchados. Foto: Especial
Representantes eclesiásticos de la arquidiócesis de Acapulco y la diócesis Chilpancingo-Chilapa refutaron la versión oficial del ataque armado registrado en Taxco, al afirmar que no fueron tres, sino dos los sacerdotes asesinados.
Además de condenar el crimen, los líderes de la Iglesia católica en la entidad informaron que eran cinco las personas atacadas que se desplazaban en la camioneta blanca y no seis como afirman autoridades estatales.
“Espero que ya le paren”, expresó el sacerdote Benito Cuenca, vocero de la diócesis Chilpancingo-Chilapa, quien informó que en menos de tres años han sido asesinados seis presbíteros en diversos puntos de Guerrero: Tres en la región de Tierra Caliente, uno en Chilapa y ahora los dos de esta madrugada.
En conferencia realizada en el curato de la iglesia de La Asunción en el centro de Chilpancingo, el prelado informó que los sacerdotes asesinados son Germain Muñiz García, originario de Apango y párroco de la iglesia de San Cristóbal, en el poblado minero de Mezcala.
Así como Iván Añorve Jaimes, de San Luis La Loma, municipio de Tecpan de Galeana y párroco de la iglesia de la Sagrada Familia en el poblado de Las Vigas, municipio de San Marcos, en la región de Costa Chica.
“Las causas del asesinato de nuestros hermanos sacerdotes están siendo investigada por autoridades competentes y confiamos que pronto sean esclarecidos estos crímenes”, indica el comunicado de la diócesis firmado por el presbítero Jorge Vázquez Rodríguez.
“Supliquemos con insistencia el Señor por la conversión de aquellos que, olvidando que somos hermanos, cometen este tipo de crímenes que tanto dañan la dignidad humana, arrebatan el don sagrado de la vida y siembran dolor y sufrimiento en la familia y en la sociedad”, señala otro comunicado de la arquidiócesis de Acapulco.
Por su parte, el gobierno de Héctor Astudillo Flores emitió un comunicado oficial donde corrigió la cifra de víctimas al señalar que fueron dos sacerdotes muertos y cuatro heridos, entre ellos dos mujeres y dos hombres, es decir, seis personas.
Los dos sacerdotes y sus cuatro acompañantes, afirma el gobierno estatal, asistieron a un festejo popular en el poblado de Juliantla, municipio de Taxco, y fueron atacados directamente cuando regresaban sobre la carretera federal Taxco-Iguala.
Las víctimas estuvieron presentes en el rancho “La Misión” del ganadero Hugo Figueroa en el contexto de las fiestas de la virgen de La Candelaria que se celebra en este lugar, donde tiene su mausoleo el extinto cantautor Joan Sebastian, indica el reporte oficial.
Además, el gobierno de Astudillo filtró esta tarde en medios varias fotografías donde se observa al obispo Salvador Rangel Mendoza posando frente a un helicóptero y con unas personas no identificadas en la Sierra de Guerrero.
También, imágenes del sacerdote asesinado, Germaín Muñiz, portando un fusil AK-47 y acompañado por sujetos encapuchados.
Desde el año pasado, el obispo Salvador Rangel mantiene una confrontación pública con el secretario de Gobierno, Florencio Salazar Adame, por la situación de impunidad y corrupción gubernamental que han desatado una ola de violencia que no cesa en la entidad.
Los sacerdotes German e Iván
Fuente: Apro