El uso de armas químicas desató una guerra de propaganda y amenazas cruzadas en Siria. El régimen de Bachar al Asad insiste en culpar a los rebeldes de almacenar este tipo de arsenal en los túneles de Yobar de Damasco. El Gobierno se ha esforzado en divulgar su versión en los medios oficiales y este domingo anunció que acepta que la ONU entre al lugar donde presuntamente hubo ataques con armas químicas.
“Estos soldados han tenido problemas para respirar y han sufrido hinchazones en las amígdalas y sensación de quemado en sus ojos. Después de examinarles, hemos visto una contracción de sus pupilas y una disminución de sus pulsaciones.”
La televisión estatal siria también ha mostrado imágenes de militares postrados en camas de hospital como consecuencia, asegura el medio, de los ataques con agentes químicos de los rebeldes.
Por supuesto, la versión oficial no convence a muchos. La de los sublevados, que culpan de la masacre del pasado miércoles al régimen, es la que también ha servido al Frente Al Nusra, vinculado a Al Qaeda, para clamar venganza. El grupo extremista ha amenazado con atentar contra la comunidad alauí en Siria, a la que pertenece el presidente al Asad.
Estados Unidos se muestra listo para actuar, pero cauto, para evitar que se repitan errores como los de Irak o Afganistán.“El Presidente Obama ha pedido al Departamento de Defensa que prepare opciones para todas las contingencias, lo hemos hecho y, de nuevo, estamos preparados para poner en marcha cualquier opción, si él quiere que la empleemos”, explicaba Chuck Hagel, secretario de Defensa.
Francia y Gran Bretaña quieren acelerar la actuación de cara a la reunión de potencias occidentales y árabes que debe tener lugar en Jordania en los próximos días. Pero Siria, con el apoyo de Irán, ya ha advertido de que cualquier intervención externa inflamaría toda la región.
Siria permite la entrada de la ONU
El régimen sirio da su brazo a torcer. La televisión estatal ha anunciado este domingo que el Gobierno permitirá a laONU el acceso al lugar de Damasco donde tuvo lugar el ataque con armas químicas del pasado miércoles. La decisión se produce un día después de la llegada al país de la Alta Representante para Asuntos de Desarme de la organización, Angela Kane. Los sublevados han denunciado la muerte de entre 500 y 1300 personas por el uso de arsenal químico por parte del régimen.
