Con sólo unos meses de haber entrado en operaciones, la Fuerza Rural dejó hoy de ejercer funciones de seguridad pública en Apatzingán y Buenavista Tomatlán.
El comisionado federal Alfredo Castillo informó que a partir de esta tarde la seguridad en esos lugares queda completamente a cargo del Ejército y la Policía Federal.
La misma medida, dijo, es para la comunidad de La Mira, Municipio de Lázaro Cárdenas.
“El Ejército Mexicano y la Policía Federal asumirán el control total de la seguridad en tres sitios específicos: en el municipio de Apatzingán, en la comunidad conocida como La Ruana, del municipio de Buenavista, y en la tenencia de La Mira”, indicó.
En conferencia de prensa, destacó que de más de 20 comunidades donde se ha instrumentado la Fuerza Rural, la medida sólo comprende tres puntos.
“Son tres puntos donde sus integrantes y/o los ex autodefensas no comprendieron la importancia de respetar las instituciones y propiciar un ambiente de calma y tranquilidad social”, argumentó.
Castillo lamentó que prevalezcan grupos con intereses distintos a la estabilidad y desarrollo de la entidad.
“Concretamente hay grupos de interés disfrazados de autodefensas que pelean el control de Apatzingán y otros grupos que se disputan además el liderazgo de su región para intentar establecer laboratorios de estupefacientes o el control del manejo de minerales”, acusó.
El funcionario sostuvo que no se permitirá la operación de grupos armados.
“Ni en estos puntos ni en ninguna otra parte del Estado podrá estar ninguna persona armada, ya que será detenida y puesta a disposición de las autoridades competentes”, amagó.
Alistan ‘guerra’ autodefensas
Lejos de dejar las armas, grupos antagónicos de autodefensas se dicen listos para una guerra en la región de Tierra Caliente.
Ambos bandos se acusan de tener nexos con el crimen organizado y se muestran armados en esta nueva lucha por el control del territorio.
“O desarman a Los Viagras o se les va a hacer una guerra aquí”, sentenció Aurelio Gómez, líder de autodefensas en la comunidad de Úspero.
En entrevista, acusó a las autoridades de permitir la operación de ese grupo armado pese a los presuntos nexos delictivos de sus líderes.
“Se le va a hacer un desmadre al Gobierno si pretende desarmarnos y dejarlos a ellos seguir operando. En ese caso mejor que nos maten”, expresó el también peleador de gallos, afín al grupo armado H3, que lidera Luis Antonio Torres, “El Americano”.
Gómez aseguró que Los Viagras están ligados al cártel de Guerreros Unidos y que su objetivo es mantener el negocio de la producción de drogas sintéticas, así como el cobro de cuotas en la región.
La entrevista fue concedida este día a algunos medios de comunicación en Úspero, localidad del Municipio de Parácuaro.
Acompañaron a Gómez familiares de 187 autodefensas detenidos el año pasado, acusados de pertenecer a Los Caballeros Templarios.
A 15 kilómetros de distancia, gente identificada como parte de Los Viagras mantiene tomada por segundo día consecutivo el Palacio Municipal de Apatzingán.
Encabezados por su líder Nicolás Sierra Santana, advirtieron que no dejarán las armas hasta no ver eliminados a todos los líderes que quedan de los Templarios.
“Quedan todavía varios templarios y los tenemos aquí cerca”, afirmó Sierra Santana.
Afuera de la alcaldía cuelgan mantas y cartulinas que exigen la detención de presuntos templarios, incluido su máximo líder, Servando Gómez, “La Tuta”.
También colocaron mensajes de apoyo al fundador de las autodefensas Hipólito Mora, quien perdió a un hijo en el enfrentamiento del pasado 16 de diciembre en La Ruana.
En ese tiroteo murieron un total de 11 personas y, según Los Viagras, el ataque fue iniciado por pistoleros de “El Americano”.
Sierra comentó que la toma de la alcaldía es para presionar a las autoridades federales para que refuercen la seguridad en la zona ante el riesgo de un enfrentamiento con el otro grupo armado.
Fuente: Reforma