Los diputados federales aprobaron un aumento de 6.81% más respecto al año anterior para gastos en combustibles, lubricantes y aditivos, pero este lunes anunciaron medidas de austeridad por lo que no podrán hacer uso de ese incremento hasta ahora secreto.
Los diputados se aumentaron 522 mil pesos para gastos en combustibles, lubricantes y aditivos, tan sólo 22 días después de ellos mismos aprobaron la liberación de los precios en las gasolinas.
Para 2016, los diputados se aprobaron 7 millones 670 mil 972 pesos para cubrir sus desembolsos por gasolinas. Para el 2017, los legisladores incrementaron para sí mismos 6.81% más respecto al año anterior.
Desde el pasado 1 de enero, los diputados tenían disponibles 8 millones 193 mil 619 pesos. Por ejemplo, tendrían garantizados con dinero público 32 mil 645 litros de gasolina magna, o 29 mil litros 342 de premium o, en su caso, 30 mil 615 de diésel, a diferencia de los sectores más golpeados con el gasolinazo como los taxistas, los concesionarios del transporte público, los pescadores o los empresarios dedicados a comercializar o distribuir productos de la canasta básica.
La noche de este lunes, 16 días después de que los precios de los combustibles fueron liberados y tras una ola de protestas en todo el país, los diputados dieron marcha atrás a pagarse combustibles, incluido el aumento que hasta este lunes no había trascendido. La Junta de Coordinación Política anunció ayer un paquete de ahorros y recortes entre los que incluyeron la cancelación de vales gasolina.
La historia sobre el incremento que se dieron los diputados inició el 8 de septiembre del 2016, la Secretaría de Hacienda solicitó a la Cámara de Diputados liberar los precios de los combustibles. La propuesta se incluyó en los criterios generales de política económica para la Iniciativa de Ley de Ingresos y el Presupuesto de Egresos del 2017. En ese documento, reconocieron que esto fue previsto hasta 2018, sin embargo –desde la perspectiva del Gobierno- se podría hacer antes de forma “gradual y regional” ante las necesidades presupuestales que enfrentaría del país.
Apenas un día antes, el 7 de septiembre, Luis Videgaray renunció como secretario de Hacienda, luego de haber orquestado la visita de Donald Trump a México entonces candidato del Partido Republicano a la presidencia de Estados Unidos. Su lugar fue ocupado por José Antonio Meade quien encabezó las negociaciones por el presupuesto ante los diputados. Hoy, Videgaray ha regresado al Gobierno como Canciller.
Esas negociaciones duraron 43 días. El jueves 20 de octubre del 2016, la Comisión de Hacienda de la Cámara de Diputados aprobó con 31 votos a favor del PRI, PAN, Movimiento Ciudadano y Nueva Alianza el dictamen de la Iniciativa de Ley de Ingresos de la Federación 2017. Ahí incluyeron la liberación de los precios en los combustibles y los montos estarían a cargo de la Comisión Reguladora de Energía.
La reunión duró apenas alrededor de una hora. Tres de los cuatro votos en contra fueron de Morena y uno más del PRD. Las inconformidades de este pequeño grupo de legisladores entre las cuales estaba la eliminación de los subsidios a los combustibles, fueron enviadas como “reservas” para discutirse en la sesión plenaria. La Comisión de Hacienda ha sido coordinada por la panista, Gina Cruz Blackledge.
Unas horas después, ese mismo 20 de octubre, la petición para liberar el precio de las gasolinas fue aprobaba por la mayoría de los diputados dentro de la Ley de Ingresos 2017 con 406 votos a favor y 43 en contra. El PRI y el PAN formaron un bloque junto con el PVEM y Nueva Alianza para apoyar en esta medida al Gobierno del Presidente Enrique Peña Nieto. Las protestas de la izquierda, PRD y Morena, no consiguieron revertir la decisión.
Los diputados tardaron sólo 22 días en ponerse a salvo del gasolinazo. El 11 de noviembre del 2016 aprobaron por mayoría el Presupuesto de Egresos de la Federación para el 2017, dentro del cual aumentaron en 522 mil pesos su bolsa destinada a combustibles, respecto al año 2016. En este caso hubo apenas 36 votos en contra del PRD y Morena contra 438 a favor del PRI, PAN, PVEM, Nueva Alianza y Movimiento Ciudadano.
Alfredo del Mazo Maza, uno de los diputados priistas integrante de la Comisión de Hacienda habló sobre lo complicado que, desde su punto de vista, fue conformar el nuevo presupuesto: “Es uno de los más difíciles de dictaminar en la historia del país, pero tiene como fin último preservar la estabilidad económica, mantener finanzas públicas sanas y el desarrollo integral de todos los mexicanos, a sabiendas de que 2017 será un año de sacrificios”.
Entre la petición de Hacienda para liberar el precio de las gasolinas y la maniobra de la mayoría de los diputados para blindarse del gasolinazo transcurrieron apenas tres meses. Justo en los márgenes que les permite el marco legal para dotar de un presupuesto al país.
Mexicanos contra la Corrupción y la Impunidad solicitó una explicación a la Cámara de Diputados sobre este aumento a través de su dirección de Comunicación Social. Sin embargo, hasta la publicación de este reportaje no respondieron.
No obstante, a sus homólogos del Poder Legislativo, a los senadores,. sí les recortaron 3 millones 683 mil 390 pesos para combustibles, cifra que representó más de 40 por ciento respecto al año 2016.
El pasado 14 de enero, el diario Reforma publicó que precisamente un grupo de senadores propondrá disminuir al menos 2 mil 345 millones de pesos en partidas que ellos califican como innecesarias en el Congreso de la Unión entre las que consideraron sus propios apoyos para gasolinas.
En términos porcentuales, los diputados se apoyaron de mejor manera de lo que hicieron ellos mismos con dos de los pilares del sector salud: El Instituto Mexicano del Seguro Social (IMSS) y el Instituto de Seguridad y Servicios Sociales de los Trabajadores del Estado (ISSSTE).
Si bien el IMSS tuvo un incremento de 16 millones 455 mil 703 pesos destinados a combustibles y aditivos, su crecimiento respecto al año anterior fue de 1.56% mientras que el de los diputados fue de 6.81%
Algo similar sucedió con el ISSSTE. Los diputados les concedieron 6 millones 610 mil pesos más para el 2017, monto que representa un incremento del 3.14% respecto al 2016. El de los legisladores es de 6.81%
Los diputados federales ganan 73 mil 817 pesos mensuales, más 45 mil 786 pesos para asistencia legislativa y 28 mil 772 pesos en atención ciudadana. En su página web oficial no han incluido junto con sus salarios las prestaciones a las que tiene derecho, entre ellas, dinero para combustibles.
En los últimos años, en la Cámara de Diputados hay una tendencia a desviarse del presupuesto aprobado para gastos en combustibles. Si se comparan las cuentas entre 2016 y 2017, subió un 6.8%. Pero en 2015, el incremento fue de 126% y de 117% respecto al 2014, sí se contrastan el dinero aprobado y lo que en realidad ejercieron.
Investigación: Miriam Castillo, Valeria Durán, Dulce González, Dulce Ramos, Janet de Luna y Daniel Lizárraga.
Fuente: Animal Político