Los demócratas cuentan con un nuevo presidente nacional del partido y es Tom Pérez, que fue secretario del Trabajo en el gobierno del presidente Barack Obama.
Perez superó a Keith Ellison, un congresista de Minnesota, en la segunda ronda de votaciones el sábado efectuada por miembros del Comité Nacional Demócrata en su reunión en Atlanta.
Perez dio un discurso antes de la votación, en el que dijo que los demócratas enfrentan una “crisis de confianza en sí mismos” y una “crisis de pertinencia”. Prometió enfrentar a Trump y a los “republicanos de derecha”.
El déficit de poder de los demócratas es muy pronunciado.
Los republicanos controlan ahora la Casa Blanca, el Congreso y casi dos terceras partes de las legislaturas estatales y gobernaciones.
Tanto Perez como Ellison prometieron reconstruir al partido a nivel local y estatal, incluidos los estados dominados por los republicanos. Ambos dijeron que el partido debe aprovechar la oposición generalizada a Trump, pero también trabajar para acercarse a los votantes frustrados de la clase trabajadora que se sintieron abandonados por los demócratas y se apegaron a Trump.
