Por medio de mensajes en redes sociales y un comunicado, Ángel Aguirre, ex gobernador de Guerrero al momento de la desaparición de los 43 normalistas de Ayotzinapa, negó haber estado en una reunión de alto nivel, encabezada por el ex procurador Jesús Murillo Karam, para planificar la llamada verdad histórica, como lo declaró un testigo colaborador durante la audiencia en la que se decretó prisión preventiva al ex procurador.
Además, acusó que Tomás Zerón, ex titular de la Agencia de Investigación Criminal, “intentó involucrarme a toda costa como miembro de la delincuencia organizada, como consta en las declaraciones formuladas por el maestro Iñaky Blanco, ex procurador del estado y el doctor Jesús Martínez Garnelo, secretario de Gobierno durante mi administración”.
En tanto, al referirse a las 33 solicitudes de nuevas órdenes de aprehensión anunciadas por el subsecretario de Derechos Humanos, Población y Migración de la Secretaría de Gobernación, Alejandro Encinas, no se hace mención de funcionarios estatales. “Estoy en Acapulco y después estaré en mi querido Ometepec, no me voy a esconder ni mucho menos”, indicó éste domingo.
“Reitero que nunca sostuve reunión alguna para planear la “verdad histórica”, nunca celebré ninguna reunión con Murillo en Iguala y en ninguna otra parte. Resulta absurdo lo que hoy se publica a ese respecto. La ‘verdad histórica’ fue desechada porque fue fabricada. Hoy es necesario que se aclare con qué propósito se desviaron las investigaciones y quién o quienes son los autores intelectuales y materiales de la obstrucción de la justicia”, expuso.
Sostuvo, además, que tanto él como varios de sus colaboradores han sido llamados a declarar y dijo que se mantienen en disposición de acudir las veces que sea necesario. También refirió que contactó al subsecretario Encinas para manifestarle su apertura para colaborar en el caso.
Fuente: La Jornada