Los aliados del régimen sirio amenazaron este domingo con represalias contra quienes “agredan” en el futuro a Damasco, después de que el viernes Estados Unidos atacara una base aérea en el centro del país.
El presidente ruso, Vladimir Putin, y su par iraní, Hassan Rouhani, conversaron por teléfono el domingo y coincidieron en que las acciones agresivas de Estados Unidos contra Siria no son aceptables porque violan la ley internacional, informó el Kremlin.
Los dos líderes, aliados del presidente sirio Bashar al-Assad, hicieron un llamado a que se realice una investigación objetiva sobre el ataque con armas químicas ocurrido la semana pasada en la provincia de Idlib, en una zona controlada por rebeldes donde murieron decenas de personas.
“La agresión contra Siria sobrepasa todas las líneas rojas. A partir de ahora vamos a reaccionar con fuerza a cualquier agresión contra Siria y a cualquier violación de las líneas rojas, sin importar de dónde venga”, advirtió en un comunicado la cámara que coordina la operación conjunta en Siria de Rusia, Irán y las fuerzas aliadas, como el Hezbolá libanés.
“Estados Unidos conoce perfectamente nuestra capacidad de reacción”, agregó el comunicado publicado por el portal de Al Watan, diario cercano al poder.
Irán y Rusia dijeron que están dispuestos a mejorar su cooperación en la lucha contra el terrorismo, afirmó el Kremlin en un comunicado publicado en su página web. Añadió que el llamado telefónico entre Putin y Rouhani se produjo por iniciativa de Teherán.
Previamente en el día, Rouhani había enfatizado el apoyo de Irán al Gobierno sirio en su “lucha contra el terrorismo” durante una llamada a Assad en la que condenó el ataque de Estados Unidos a una base en Siria, calificándolo como una violación de soberanía.
La agencia de noticias estatal siria SANA informó que Assad dijo a Rouhani que el pueblo sirio y el Ejército están “determinados a aplastar al terrorismo en cualquier parte del territorio sirio” y agradeció el apoyo de Irán a su país.
Estados Unidos lanzó un ataque con misiles el viernes contra una base aérea siria en respuesta a un ataque con armas químicas que causó la muerte de 87 personas, incluyendo 31 niños, el que Washington dice fue perpetrado por fuerzas del Gobierno sirio.
El Gobierno de Assad niega tener cualquier vínculo con el ataque ocurrido en la localidad de Khan Sheikhoun.
Rusia dijo que las muertes fueron causadas por un ataque aéreo sirio que impactó un depósito donde rebeldes fabricaban armas químicas, lo que llevó a la fuga de gases tóxicos. Grupos de opositores a Assad niegan esta versión.
También el domingo, el secretario de Estado estadounidense, Rex Tillerson, apuntó a la inacción de Rusia como un factor que habría permitido a Siria lanzar el ataque con gases tóxicos en Idlib y dijo que Moscú no cumplió con su parte del acuerdo para destruir el arsenal de armas químicas de Damasco.
“Creo que el fracaso real aquí ha sido la incapacidad de Rusia para cumplir con sus compromisos bajo los acuerdos de prohibición de armas químicas que fueron firmados en el 2013”, dijo Tillerson al programa “This Week” de la cadena ABC.
Está previsto que Tillerson se reúna en Moscú esta semana con funcionarios rusos