Alemania tomó medidas de urgencia para asegurar el suministro de energía ante las recientes reducciones en las entregas de gas ruso, lo que implica recurrir más al carbón, medida “amarga”, pero necesaria, en momentos en que Austria se dispone a reactivar una planta de carbón.
El gobierno alemán reacciona a los anuncios de esta semana del gigante ruso Gazprom sobre la reducción de entregas de combustible a través del gasoducto Nord Stream, en el contexto de la guerra en Ucrania y el pulso energético entre países occidentales y Moscú.
Esta medida es un giro de 180 grados para el gobierno de coalición alemán, que incluye a los ecologistas y que prometió abandonar el uso de carbón antes de 2030.
“Es amargo, pero es indispensable para reducir el consumo de gas”, declaró el ministro de Economía, el ecologista Robert Habeck, en un comunicado.
Alemania busca llenar sus instalaciones de almacenamiento de gas antes del invierno, cuando el combustible se necesita con mayor urgencia para calefacción.
El último recurso
En este contexto, el gobierno permitirá el uso de centrales de carbón llamadas “de reserva”, ya que actualmente sólo servían en último recurso.
El paquete de medidas anunciado ayer también prevé un sistema de “subastas” para la venta de gas a las industrias, lo que permitiría, según Berlín, reducir el consumo del poderoso sector manufacturero alemán.
Por su parte, el gobierno austriaco anunció que reabrirá una planta de carbón ante la disminución de las entregas de gas ruso.
En tanto, el ejército ucranio afirmó ayer que logró frenar ataques rusos cerca de la ciudad de Severodonietsk, en contraste con el ministerio ruso de Defensa que aseguró que “la ofensiva contra Severodonietsk se lleva a cabo con éxito”.
Mientras, el secretario general de la Organización del Tratado del Atlántico Norte, Jens Stoltenberg, advirtió: “debemos prepararnos para el hecho de que la guerra podría durar años. No debemos cejar en el respaldo a Ucrania, incluso si los costos son altos, no sólo por el apoyo militar, también por el aumento de los precios de la energía y los alimentos”.
Estados Unidos transfirió a Ucrania más de mil 400 sistemas antiaéreos Stinger y 6 mil 500 sistemas Javelin, informó en Twitter la diputada ucrania Kira Rudik.
(Afp, Europa Press y Reuters)