El discurso especial de cierre del evento económico más importante del año, que se celebró en Davos, Suiza, estuvo a cargo del canciller alemán, Olaf Scholz, quien envió un mensaje más político que económico. El Foro Económico Mundial volverá en 2023 a su fecha habitual de invierno: “Putin no debe ganar esta guerra. Y estoy convencido de que no la ganará”.
El Foro Económico Mundial en Davos llegó a su fin este jueves 26 de mayo, luego de mudarse del invierno a la primavera debido al más reciente brote de la pandemia del Covid-19.
Después de una pausa de más de dos años, la reunión anual en los Alpes suizos de este año atrajo a una mezcla de líderes políticos y empresariales mundiales con una agenda liderada por la guerra en Ucrania.
El Foro Económico Mundial se celebra habitualmente en invierno, pero este año fue pospuesto por unos meses debido al rebrote de la variante Ómicron en Europa. Sin embargo, el próximo año volverá a tener lugar en enero.
En su discurso especial del día de cierre del evento, el canciller alemán, Olaf Scholz, aseguró que “nuestro objetivo es muy claro: Putin no debe ganar esta guerra. Y estoy convencido de que no la ganará. Él ya falló en todos sus objetivos estratégicos”.
One thing is clear: Deglobalisation is the wrong track! It will not work. We need a different globalisation that promotes smart and sustainable solutions to climate change as well as solidarity-based action in the food crisis or in the fight against pandemics. 3/3
— Bundeskanzler Olaf Scholz (@Bundeskanzler) May 26, 2022
“Es por eso que estamos apoyando a Ucrania, un apoyo estrechamente coordinado con nuestros socios y aliados. Y también estamos de acuerdo en este punto: no estamos haciendo nada que haga que la OTAN sea parte del conflicto, eso significaría una confrontación directa entre armas nucleares, es más bien una cuestión de dejarle claro a Putin que no habrá una paz impuesta. Ucrania no lo aceptará, y nosotros tampoco”, puntualizó.
Para los asistentes a la cumbre, además, de Ucrania, los principales temas de conversación incluyeron las amenazas a la economía mundial por las secuelas de la crisis sanitaria provocada por el Covid-19 y los cambios de inversión originados en el cambio climático.
El último día de la reunión de 2022 estuvo marcado por una manifestación de activistas que pedían una acción más urgente sobre el cambio climático. Su protesta se hizo eco de las anteriores en la más reciente reunión de enero de 2020, cuando la activista sueca Greta Thunberg advirtió a los participantes que el mundo “todavía estaba en llamas”.
Fuente: EFE/ Reuters