El Servicio Federal de Inteligencia de Alemania (BND) en un informe ha culpado del siniestro del vuelo MH17 ocurrido en el sudeste de Ucrania a las autodefensas. Esta información ha sido divulgada este domingo por la revista ‘Der Spiegel’.
La revista alemana sostiene que el informe fue presentado el 8 de octubre ante el Comité Parlamentario de Control, el organismo que supervisa las actividades de los servicios de inteligencia alemana. ‘Der Spiegel’ precisa que las conclusiones se basan en imágenes de satélites y “evidencia fotográfica diversa”, pero no da más pruebas y ni siquiera explica de qué fotos se trata precisamente.
Al mismo tiempo, haciendo referencia al máximo responsable del BND, Gerhard Schindler, la revista escribe que algunas fotos proporcionadas por la parte ucraniana habían sido manipuladas y que hay detalles que lo indican, pero en este caso tampoco dice de qué fotos habla.
‘Der Spiegel’ citando a Schindler dice que la tragedia se debió a que las autodefensas capturaron un sistema de defensa antiaérea Buk en una base de las Fuerzas Armadas de Ucrania y dispararon el 17 de julio un misil que explotó cerca de la trayectoria del avión. Esto, cuando la comisión internacional oficial en su informe preliminar —basado en el análisis de las cajas negras y del lugar del siniestro— habló solo de un impacto desde exterior y no mencionó a los complejos Buk en ningún momento.
¿Estrategia?
Otro hecho que también llama la atención es que la publicación de ‘Der Spiegel’ sale 11 días después de que fuera presentado el citado reporte, pero justo tras la cumbre Asia-Europa en Milan, Italia, donde el presidente ruso Vladímir Putin se reunió con varios líderes europeos, incluso con el mandatario ucraniano Piotr Poroshenko.
“Los servicios de inteligencia de Alemania son muy dependientes de la inteligencia estadounidense. Lo que están haciendo ahora es sencillamente aumentar el eco de un rumor que no tiene ningún tipo ni de verificación ni de prueba”, insistió ante RT el periodista y exmilitar Gustavo Morales.
Esta información emerge ahora “para romper cualquier tipo de acercamiento que pudiera estar realizando Moscú con la Unión Europa, para evitar que algunos países de la Unión Europea comiencen a desmarcarse de la política oficial de Washington”, opina Morales.
Desde los primeros momentos, Washington ha estado presentado versiones propias de lo sucedido sin apoyarse en pruebas claras, pero insistiendo en que de uno u otro modo es Moscú el responsable de la tragedia. Precisamente con estos argumentos basó la necesidad de endurecer las sanciones antirrusas.
Tres meses sin respuestas
El Boeing 777 malasio siniestrado el pasado 17 de julio en la región ucraniana de Donetsk llevaba 298 personas a bordo. La mayoría de ellas –196 personas– provenían de los Países Bajos. Las dos partes implicadas en el conflicto que se libra en Ucrania, el Gobierno y las autodefensas, que se negaron a reconocer el gobierno surgido del golpe de Estado ocurrido en febrero en Kiev, se acusan mutuamente del derribo del avión.
Con el consentimiento de la parte ucraniana la investigación del accidente ha corrido a cargo del Consejo de Seguridad Nacional de los Países Bajos durante los últimos tres meses. Su informe preliminar fue publicado el pasado 9 de septiembre. Se espera que el reporte final esté listo para el 2015.
Fuente: RT
Aquí puedes leer en inglés el reporte de Der Spiegel: