La Policía de Ciberdelincuencia Preventiva (PCP) del DF detectó una nueva modalidad delincuencial en internet, la cual registra un aumento en fraudes y extorsiones, realizados a través de mensajes de texto en la aplicación para dispositivos móviles WhatsApp. Los delincuentes usan los datos que aparecen en los perfiles personales que los usuarios publican en las redes sociales.
Según la PCP, dependiente de la Secretaría de Seguridad Pública del Distrito Federal, el modus operandi de los defraudadores consiste en obtener, primero, a través del perfil de redes sociales, principalmente Facebook, el número telefónico de la casa o del celular del usuario, así como información personal, como los nombres de sus familiares, fotografías, escuelas a las que asisten las víctimas o sus hijos, domicilio laboral y sitios frecuentados, entre otros datos que las misma víctimas publican en su muro o perfil personal.
Después de tener estos datos, el delincuente envía mensajes intimidatorios a través de WhatsApp, asociando datos y las fotografías obtenidas del perfil, haciendo suponer que cuenta con información de todos los movimientos de la víctima. Luego de transmitir las amenazas, empieza la extorsión.
Según la dependencia, en lo que va del año se han registrado 20 denuncias con esta nueva modalidad, sin embargo, en tan sólo los pasados dos meses y sobre todo en esta temporada vacacional, se incrementaron las quejas, contabilizándose hasta 10 por día.
De las víctimas que han presentado su denuncia ante la PCP, sólo 10 han aceptado que cayeron en la extorsión, pagando cantidades de entre 5 mil y 10 mil pesos que se solicitan para, supuestamente, no hacerle daño a sus seres queridos.
El dinero es depositado a través de cuentas en tiendas departamentales, las cuales se cobran con facilidad en cualquier parte del país, por lo que hasta el momento, la SSPDF no ha logrado determinar en donde exactamente opera esta banda cibernética.
Las víctimas son principalmente mujeres de clase media alta, que sin precaución alguna publican sus actividades diarias, en qué sitio se encuentran, a qué hora y dónde tendrán alguna cita, fotografías de sus hijos, en qué lugares gustan vacacionar o comer o incluso reuniones familiares en donde detallan la identidad de sus seres queridos, actos que facilitan a los delincuentes la obtención de datos referenciales de la víctima.
El otro blanco de este grupo criminal son los jóvenes que también presumen sus actividades. Toda esta información es obtenida por los delincuentes cibernéticos y después utilizada para extorsionar a sus padres, quienes al no establecer contacto con ellos de manera inmediata, optan por pagar antes de denunciar el evento a las autoridades.
Recomendaciones
Ante ello, la dependencia recomendó aplicar algunas medidas de prevención como el no publicar datos personales en las redes sociales y colocar las medidas de restricción de privacidad que se ofrecen en redes y en los dispositivos telefónicos.
Además, en caso de que el usuario reciba algún mensaje intimidatorio vía escrita o telefónica, es recomendable no contestarlo y, en el mejor caso, acudir a establecer la denuncia ante la autoridad correspondiente.
La PCP advierte que si el usuario es víctima de este tipo de extorsiones debe establecer contacto e informar lo más pronto posible a sus familiares para evitar que sean utilizados como parte del engaño.
Fuente: El Universal