El primer ministro británico tratará de convencer a los legisladores para que voten a favor de su pacto
Tras obtener el respaldo de los líderes de la Unión Europea a su nuevo acuerdo para el Brexit, el primer ministro de Gran Bretaña, Boris Johnson, regresó a Londres para intentar recabar apoyos en el reticente parlamento británico.
Johnson volvió de madrugada, antes de lo que se prevé sea un viernes ajetreado en el que tratará de convencer a los legisladores para que voten a favor de su pacto en una inusual sesión parlamentaria el sábado.
Se espera que la votación en la Cámara de los Comunes sea ajustada.
El Partido Conservador de Johnson no tiene mayoría en la cámara baja de 650 escaños, por lo que estará a expensas del respaldo de otros partidos y de legisladores independientes para sacar adelante el plan.
El secretario de Exteriores, Dominic Raab, madrugó para comenzar la campaña.
“Ahora tenemos una oportunidad real de completar el Brexit siendo fieles al referéndum, de avanzar como gobierno, y creo que como país, y de despejar las nubes del Brexit”, dijo en declaraciones a la BBC.
Raab señaló además que el ejecutivo no pierde la esperanza de convencer al Partido Unionista Democrático (DUP), su aliado de Irlanda del Norte, que en la víspera rechazó el nuevo acuerdo de divorcio entre Londres y Bruselas.
Pero las posibilidades de que esto ocurra parecían escasas. El vocero del DUP para el Brexit, Sammy Wilson, señaló que el paquete para el Brexit negociado por Johnson era malo para su región.
“Puedo garantizarles que no votaremos a favor de este acuerdo ante los Comunes mañana”, declaró a la BBC.
El futuro del acuerdo podría depender en gran medida de un grupo formado por exdiputados conservadores díscolos que fueron expulsados de la formación a principios de año y miembros del Partido Laborista, la principal formación opositora, que cuenta con 244 miembros. Alrededor de 20 de ellos, en su mayoría representantes de regiones que votaron por el Brexit, se mostraron favorables en el pasado a votar un documento que respetase el resultado del referéndum celebrado en junio de 2016.
Ni siquiera analistas expertos pueden proporcionar números exactos.
“Parece haber indicios de que será (una votación) muy, muy ajustada que se reducirá a una, dos o cinco personas”, señaló Joelle Grogan, profesora de derecho británico y comunitario en la Universidad de Middlesex. “Pero a 24 horas, no tengo idea de lo que podría ocurrir”.
Si la campaña de Johnson tiene éxito y el acuerdo recibe luz verde, Londres se desligaría del bloque el próximo 31 de octubre en el plazo previsto.
Pero si los legisladores lo rechazan, como hicieron con el presentado por la antecesora de Johnson, Theresa May, en tres ocasiones, una ley aprobada a principios de año obliga al primer ministro a pedir una nueva ampliación a Bruselas.
Preguntado por su respuesta a la solicitud de una posible prórroga, el presidente del Consejo Europeo, Donald Tusk, dijo el jueves que consultará a los otros 27 socios comunitarios para alcanzar una decisión, dejando abierta la posibilidad de una nueva demora.
Fuente: AP
